Conversar durante horas con Julio Ozán Lavoisier puede resultar siempre corto. El filósofo cumple con creces su rol de pensador y analista de la realidad humana, basándose en la ponderación del espíritu y preservando la cultura y la moral, como formadoras del ser humano.
Así lo reflejó en la entrevista que Luis Ábrego y Luis Martínez le hicieron este martes en el programa Lado A, de Radio Jornada, donde el también escritor comentó cómo será la presentación de su libro: “Las raíces de la moral”.
“La tarea de la Filosofía es buscar el origen de las cosas, la manera de encontrar inspiraciones sólidas. La moral no se encuentra en la vida cotidiana intercambiando opiniones, sino buscando sus raíces precisamente”, explicó Ozán Lavoisier para comentar la inspiración que lo llevó a escribir sobre este tema.
Según el pensador, que nació en Mendoza hace 83 años, pero que ha vivido en distintas partes del mundo, incluyendo la India, país cuya cultura y espiritualidad admira, la gente que vive en Occidente tiende a ponderar el capitalismo desechando la moral.
Y esto lo resalta cuando en épocas como la que atraviesa actualmente Argentina, se cuestiona precisamente la moral, en el medio de un proceso electoral.
“Hace como un par de siglos que Occidente anda en decadencia y la gente no lo advierte porque ve que hay un progreso material, pero la moral es un proceso interno que se desarrolla en la conciencia de las personas, y como están cada vez más alienados de ese centro de conciencia, se vuelca más sobre las cosas y eso genera una especie de círculo vicioso que no evita la decadencia. La decadencia es interna”, señaló.
-¿Qué pasa en un país como Argentina, donde las cosas materiales están en crisis?
-Por supuesto, tenemos que ocuparnos también de la Economía, pero eso ya no es Filosofía. Aunque el materialismo es una filosofía que pretende encontrar soluciones en la Economía, pero no es estrictamente una filosofía. La filosofía se encuentra y se inspira en ideales trascendentes y esas esas raíces van por el lado de los ideales trascendentes.
-¿Y en las sociedades contemporáneas? Porque parece que la sociedad va por un lado y el destino de la humanidad va por el otro…
-Ahí está el problema. La alienación del hombre no le permite resolver ese problema. Porque estando alienado, no ve el problema. Y como está exteriorizado, busca soluciones externas. Esto no tiene fin, no lo veo muy positivo, porque está en un círculo vicioso que lo lleva por mal camino.
El viernes próximo, en la Legislatura provincial, Ozán Lavoisier presentará su libro y hablará de moral, cultura y política. En la entrevista en Jornada ensayó una explicación simple de su relación.
“El político es el que puede incrementar la cultura. Está en el poder y el poder en manos de gente ilustrada es muy diferente que el poder de gente sin cultura. Lo primero que propongo es un gobierno de ilustrados. Probablemente sea utópico, pero es indispensable. Cuanto más culto sea el que gobierna más culto será el el gobernado”.
Escuchá la entrevista completa a Julio Ozán Lavoisier
Te puede interesar