El Gobierno nacional ha iniciado todo un proceso de desmantelamiento de los registros del automotor en todo el país y promoviendo además fuertes cambios en el actual sistema de compras, ventas y transferencias de vehículos, a partir de los altos costos que implican para usuarios y propietarios.
Sin embargo, desde la Cámara de Comercio nacional consideran que si bien el actual sistema “se puede mejorar”, sigue garantizando “seguridad jurídica” en el control necesario para evitar estafas y que los costos “se pueden bajar” si las provincias bajan determinadas tasas.
Así lo destacó en el programa de "Lado A", de Radio Jornada, Alejandro Lamas, secretario y vocero de la CCA.
“El auto en la Argentina es el segundo bien más caro que tiene en general a una persona después de una propiedad y todos necesitamos un buen resguardo jurídico, para lo que necesitamos ciertos controles o pasos. Hasta ahí sabemos que (los registros) funcionan”, explicó el dirigente”.
Pero además dio a entender -en clara coincidencia con lo dicho días atrás por el representante gremial de la Cámara de Mandatarios-, que tanto la actual burocracia como el tema de los altos costos que hoy se pagan “se puede mejorar” con el sistema tal como está.
“En cuestión de burocracia, todo se puede digitalizar más de lo que está ahora”, dijo. Y de inmediato habló de los costos y le achacó a las provincias la responsabilidad de que hoy se encarezca tanto el trámite.
“El Gobierno provincial se lleva la mayor parte de lo que se recauda”, indicó, explicando que el Impuesto a los Sellos, que depende de esta administración local en cada provincia, “se lleva la mitad del costo total” que se paga al momento de vender y transferir estos bienes.
En ese sentido consideró que “el Ejecutivo nacional no puede sacar por decreto este impuesto”, por razones de jurisdicción. En consecuencia, desde su visión, el problema se resolvería “si las provincias bajan ese impuesto”.
Aunque está claro que existen serias dificultades para que eso suceda. “Si se pusieran de acuerdo las provincias, se lograría quitar la mitad de ese costo”, se ilusionó, aunque de inmediato volvió a la complicada realidad económica actual para señalar: “¿Cómo se hace para decirle a los gobernadores que hoy están con la lengua afuera porque no pueden recaudar más, que no pueden cobrar el impuesto a los sellos?”.
Y también quiso destacar que “la otra mitad del costo”, que depende de lo nacional, “también se puede mejorar realizando un trabajo ‘finito’”, para concretarlo.
Para evitar estafas
El propio Lamas hizo docencia en la entrevista y recordó que los registros del automotor se crearon en el año 1958, con la idea de disminuir las estafas que en esa época se veían cotidianamente en la compra-venta de automóviles.
Y de algún modo quiso mostrar que los cambios propuestos por el Gobierno de Javier Milei puede generar un escenario similar.
“Con las medidas de derogar la cédula azul y de que no tenga vencimiento la cédula verde, ya se ven ventas en redes sociales como Facebook donde un auto que puede salir 7 millones se vende a 2 millones con sólo la tarjeta verde”, informó. Y cuestionó: “Eso no te da ninguna garantía de seguridad jurídica”.