El Gran Premio de Las Vegas no deja de sorprender. En su edición inaugural de 2023, rompió con una tradición de 38 años al no celebrarse en domingo, una disposición que se repite este fin de semana en su esperada segunda edición, programada para el sábado 23 de noviembre.
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El debut del GP de Las Vegas fue un espectáculo que desbordó glamour. Kylie Minogue brindó un concierto memorable, los 20 pilotos participaron en una ceremonia de apertura a lo largo de la icónica recta principal, y Max Verstappen se coronó vencedor tras una carrera vertiginosa con 99 adelantamientos, la mayor cifra registrada en un gran premio desde China 2016.
Este evento, que se desarrolla a contracorriente del habitual cronograma de viernes a domingo de la Fórmula 1, responde a una estrategia pensada para captar audiencias globales.
¿Por qué Las Vegas apuesta por el sábado?
La elección de un sábado para el GP de Las Vegas tiene una lógica que va más allá de lo deportivo. La Fórmula 1 busca maximizar su alcance global en este evento, considerado uno de los más espectaculares del calendario.
Con ocho horas de diferencia respecto a Europa Central, y siendo una carrera nocturna, mantener el horario tradicional de domingo complicaría las audiencias europeas: la carrera comenzaría en la madrugada del lunes, cuando gran parte de los fanáticos deben trabajar o estudiar.
Por otro lado, realizar la carrera durante el día en Las Vegas no encajaría con la identidad de la ciudad, conocida como la capital mundial del entretenimiento. La idea es que el espectáculo coincida con el vibrante horario nocturno de la ciudad, iluminando el famoso Strip con sus luces de neón mientras los monoplazas recorren sus calles entre festejos y celebraciones.
El horario elegido también busca un equilibrio para la audiencia internacional. Con un inicio a las 6:00 GMT (7:00 CET), los europeos pueden seguir la acción a una hora razonable, y los estadounidenses pueden disfrutar del espectáculo sin renunciar al atractivo de la noche en Las Vegas.
Una apuesta crucial para la Fórmula 1
Este evento es especial no solo por su espectacularidad, sino porque la Fórmula 1 es también la promotora del Gran Premio de Las Vegas, algo inusual. Esto significa que, más allá de lo deportivo, el éxito económico del evento es clave para justificar la millonaria inversión realizada.
La Fórmula 1 tiene claro que, al captar a la mayor cantidad posible de espectadores globales, no solo asegura el éxito del GP de Las Vegas, sino que refuerza su posición como una de las disciplinas deportivas más adaptadas a los nuevos tiempos.