De cara a la gran final de Gran Hermano, esta semana Romina, Nacho, Julieta y Marcos se reencontrarán con sus seres queridos. La primera en reencontrarse con su familia fue la exdiputada, quien durante la noche del lunes pasó un lindo momento con sus hijas Mía, Felicitas y Nina en el sum de la casa más famosa del país.
Este martes le tocó el turno a Nacho. El hermanito, que cuando entraron los parientes se encontró con su papá Rodolfo y estuvo con él bastantes días, recibió dos visitas muy especiales: la de su abuela Teresa y la de Jesús, la expareja de su padre.
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Antes de que el hermanito ingrese al sum, Jesús y Teresa charlaron con Santiago del Moro. Jesús contó que estuvo con Rodolfo durante 16 años y que a Nacho lo conoció cuando era muy chiquito. Además, explicó que cuando lo conoció lo trató como a una persona y no como un niño, y que al poco tiempo le propuso que podían ser mejores amigos.
Luego Nacho ingresó al sum y se reencontró con su familia. Primero con su abuela y después con el ex de su papá, ya que por consejo de Santiago se escondió en el cuarto de limpieza.
El reencuentro fue más que conmovedor. Tanto el participante como su abuela y su segundo papá rompieron en llanto y se fundieron en un abrazo eterno. Además tuvieron tiempo para charlar y decirse cosas lindas. Y tanto Jesús como Tesi le dieron mucho aliento a Nacho de cara a la recta final del programa.