En medio de la creciente inestabilidad económica en Argentina, el economista y político libertario Javier Milei se encuentra en el centro de la atención pública luego de una gran elección en las PASO y comienza a tomar fuerza su propuesta de dolarizar la ecoomía del país. Junto a su colaborador Emilio Ocampo, Milei ha presentado un plan detallado que busca implementar un modelo similar al proceso de dolarización que Ecuador adoptó en el año 2000. A medida que se acercan las elecciones presidenciales de octubre, esta propuesta promete ser un tema crucial de debate.
Ocampo compartió sus perspectivas a través de una entrevista en FM Milenium, donde delineó las características fundamentales de la propuesta de dolarización en Argentina. Un punto crucial resalta que no sería necesario contar con reservas en el Banco Central ni recurrir a cuantiosos préstamos internacionales para impulsar el proceso.
Explicando esto, el asesor señaló que los ciudadanos argentinos acumulan un excedente de más de USD 200.000 millones en ahorros. En el escenario de que estos fondos ingresaran a la circulación, por ejemplo mediante el pago de impuestos, se generaría automáticamente un flujo de divisas que el Estado podría emplear para llevar adelante la transición hacia el nuevo sistema.
Detallando los números, ele conomista calcula que el canje de la totalidad de los pesos en circulación y el dinero depositado en entidades bancarias al tipo de cambio vigente representaría una necesidad de aproximadamente USD 60.000 millones. Sin embargo, propone un enfoque gradual a través de dos fases: en la primera etapa, se efectuaría el canje por un monto de USD 30.000 millones referentes al dinero en poder del público.
La segunda fase estaría destinada a los restantes USD 30.000 millones, los cuales se encuentran invertidos en instrumentos financieros como las Leliq. Esta fase secundaria se extendería a lo largo de un período estimado de 4 años.
Ocampo sostiene que, siguiendo su cálculo, en tan solo 16 meses sería posible completar el canje de todos los pesos existentes por dólares. Esta transición sería gradual, tomando como ejemplo el caso de Ecuador, donde se llevó a cabo un proceso similar en un lapso de 9 meses. Adicionalmente, resalta que la nominación de depósitos y créditos bancarios en moneda extranjera sería parte integral del cambio.
La propuesta de dolarización planteada por el economista no solo aborda la dimensión económica sino también la confianza en el sistema financiero y la posibilidad de estabilidad monetaria. Con esta visión en mente, la propuesta sigue siendo objeto de análisis y debate, generando un diálogo esencial en el camino hacia posibles soluciones en el complejo contexto económico de Argentina.
Claves del Plan de Dolarización de Milei y Ocampo:
Eliminación del Peso Argentino: La piedra angular de la propuesta de Milei y Ocampo es la eliminación del peso argentino como moneda de curso legal en favor del dólar estadounidense. Siguiendo el ejemplo ecuatoriano, el dólar se convertiría en la única moneda en la que se realizarían transacciones en Argentina.
No Requiere Reservas o Préstamos Internacionales: A diferencia de algunas propuestas que habían planteado la necesidad de reservas en el Banco Central o préstamos internacionales para respaldar la dolarización, Milei y Ocampo argumentan que los argentinos tienen una considerable cantidad de dólares guardados, lo que permitiría el inicio del proceso sin necesidad de recursos externos.
Cambio Gradual: El proceso de dolarización propuesto se llevaría a cabo en dos etapas. En la primera, una parte de los pesos en circulación se canjearía por dólares, mientras que la segunda etapa involucraría el canje del resto de los pesos invertidos en instrumentos financieros como las Leliq. Esta fase gradual pretende minimizar las perturbaciones económicas.
Estabilidad Monetaria y Control de la Inflación: Milei y Ocampo sostienen que la dolarización podría ayudar a estabilizar la economía argentina y controlar la inflación. Al establecer el dólar como moneda de referencia, se espera que se reduzcan las expectativas inflacionarias y se promueva la confianza en el sistema financiero.
Impacto en el Sistema Bancario: En caso de llevarse a cabo, el sistema bancario operaría en dólares. Esto implicaría que los depósitos y créditos bancarios se denominarían en moneda extranjera, lo que podría contribuir a una mayor estabilidad financiera.
Reemplazo de Billetes de Menor Denominación: Dado que importar monedas sería inviable, la propuesta incluye el mantenimiento de billetes de pesos de menor denominación para transacciones de bajo valor. Por ejemplo, el billete de 200 pesos podría reemplazar la moneda de un cuarto de dólar.
Confianza en el Sistema Financiero: La experiencia de Ecuador es citada como un caso de éxito en la restauración rápida de la confianza en el sistema financiero tras la dolarización. A medida que los depósitos aumentaron significativamente en ese país, se espera un efecto similar en Argentina.
Debates y Críticas: Aunque la propuesta ha captado la atención, no está exenta de críticas. Algunos críticos argumentan que la dolarización podría enfrentar obstáculos logísticos y generar consecuencias sociales y económicas no deseadas.
La propuesta de dolarización de Milei y Ocampo promete ser un tema candente en el panorama político y económico de Argentina en los próximos meses. A medida que se acerca el período clave hasta las elecciones presidenciales de octubre, la implementación de esta audaz propuesta podría definir la dirección futura de la economía argentina y su relación con la moneda internacional.