En medio de un escenario político tenso y convulso, la excandidata presidencial y titular de la Coalición Cívica, Elisa "Lilita" Carrió, no ha dudado en señalar con contundencia al expresidente Mauricio Macri como el principal responsable de la división y debilidad actual de la coalición opositora Juntos por el Cambio.
Las declaraciones de Carrió surgieron a raíz del acuerdo electoral alcanzado entre Mauricio Macri y el candidato libertario Javier Milei de cara al balotaje. La histórica figura de la política argentina no escatimó críticas al calificar esta alianza como un acto de destrucción de Juntos por el Cambio. Según Carrió, Macri ha cometido un grave error al buscar esta alianza con Milei, un personaje político de ideología extremadamente liberal y polémico.
"No podemos ignorar que el que destruyó Juntos por el Cambio es Macri", sentenció Carrió durante una entrevista televisiva con LN+. Su punto de vista se basa en la convicción de que esta alianza aleja a un sector importante del electorado que no se siente representado por la retórica libertaria de Milei, lo que ha llevado a una división en las filas opositoras.
Pero las críticas de Carrió no se quedaron en Macri. También se dirigió a Patricia Bullrich, la excandidata presidencial y líder del PRO, quien ha mostrado interés en forjar una alianza con Javier Milei. Carrió advirtió que esta decisión sería un "error histórico". Señaló que su partido no está dispuesto a someterse a ninguna extorsión política y llamó a impugnar el voto como medida de protesta.
La exdiputada resaltó que la Coalición Cívica no dará "un salto al vacío" al apoyar propuestas de La Libertad Avanza, el partido de Milei, que incluyen ideas como la venta de órganos y "la venta de niños". Carrió subrayó que estas propuestas violan los derechos humanos y son inaceptables desde una perspectiva ética y legal.
Además, Carrió destacó que el kirchnerismo ya se encuentra en una posición ventajosa debido a los errores estratégicos de Macri. En su opinión, la coalición opositora no debería comprometerse en alianzas que puedan alejar a un electorado más moderado y centrista, que históricamente ha sido clave en las elecciones argentinas.