Los policías detuvieron de inmediato a la irresponsable conductora.
No midió las consecuencias. Seguramente alguien le dijo que no tome de más, pero hizo caso omiso a ese pedido. Tomó una copa más y agarró las llaves para volver a casa.
El manejo serpenteante hizo presumir que la vuelta al hogar no sería nada sencilla. De pronto un móvil policial apareció en el camino y los reflejos no permitieron accionar los frenos para detener la marcha del vehículo y se produjo un fuerte impacto en céntricas calles mendocinas.
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El accidente lo provocó una mujer que al realizarle el dosaje arrojó 2.15 gramos de alcohol en sangre.
El accidente sucedió en Arístides y Martínez de Rozas de Ciudad.
La mujer quedó detenida de inmediato.
Fuente: Radio Nihuil
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