Dos décadas después del asesinato de María Marta García Belsunce en su casa del country Carmel, la Justicia bonaerense puso un punto final: Nicolás Pachelo es culpable y deberá cumplir prisión perpetua. La Sala V del Tribunal de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires confirmó la condena del exvecino de la víctima, dejando firme el fallo que lo halló responsable del homicidio.
La decisión anula la absolución que Pachelo había obtenido en diciembre de 2022, cuando el Tribunal Oral Criminal N°4 de San Isidro lo declaró inocente por mayoría. En marzo de 2024, la Sala II de Casación revisó ese veredicto y determinó que los jueces cometieron un error al no valorar correctamente las pruebas. Ahora, la Sala V ratificó esa postura y desestimó los recursos presentados por la defensa.
Las claves del fallo: pruebas ignoradas y contradicciones en la absolución
Los jueces Manuel Alberto Bouchoux y Fernando Jorge Mateos rechazaron los argumentos de la defensa, que había pedido la prescripción del caso y cuestionado la validez de las pruebas. Según Casación, la condena se basó en evidencia suficiente y en una reconstrucción lógica de los hechos.
Uno de los puntos centrales fue el móvil del crimen. La fiscalía sostuvo que Pachelo ingresó a la casa de García Belsunce con intenciones de robo y la asesinó al ser reconocido. Un cofre metálico con dinero y documentos desapareció ese día, y la Justicia consideró probado que fue sustraído por el asesino.
Los jueces remarcaron que no hubo un ingreso forzado al country Carmel y que el responsable debía ser alguien con acceso al barrio cerrado. Pachelo, quien vivía allí, era conocido por sus antecedentes de robos en casas de vecinos. Su historial delictivo y la brutalidad con la que fue ejecutado el crimen encajaban en un mismo patrón.
Además, testigos lo ubicaron en la escena del crimen y señalaron actitudes sospechosas. Un empleado de una estación de servicio declaró que, antes de que se conociera la noticia del asesinato, Pachelo ya hablaba del crimen. Otro testigo relató que lo vio corriendo cerca de la casa de la víctima el día del homicidio.
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Un crimen brutal y una investigación plagada de giros
El 27 de octubre de 2002, María Marta García Belsunce fue encontrada sin vida en el baño de su casa. En un principio, su familia creyó que se había golpeado la cabeza al caer en la bañera. Sin embargo, la autopsia reveló que había sido asesinada de cinco disparos en la cabeza con un arma calibre .32.
El caso se convirtió en uno de los más enigmáticos de la historia criminal argentina. Durante años, la investigación estuvo centrada en el entorno familiar. Su esposo, Carlos Carrascosa, fue condenado por encubrimiento y luego absuelto. Pero el giro decisivo llegó cuando la Justicia puso el foco en Pachelo, un vecino con antecedentes de robos en barrios cerrados.
Tras una serie de idas y vueltas judiciales, la condena a prisión perpetua fue confirmada. La Justicia consideró que Pachelo tenía acceso irrestricto al Carmel, un perfil violento y una motivación clara para el crimen.
Con este fallo, el caso García Belsunce llega a su desenlace definitivo: Pachelo pasará el resto de su vida tras las rejas.