La investigación contra los rugbiers franceses, acusados de agresión sexual, ha sufrido un nuevo revés. Según informaciones que han trascendido en las últimas horas, la mujer que denunció a los deportistas franceses intentó suicidarse la semana pasada, según reveló la periodista Silvina Isgro en sus redes sociales. El hecho habría ocurrido el viernes por la madrugada, lo que explicaría que no concurriera al peritaje psicológico que tenía programado.
La denunciante debía presentarse el viernes de la semana pasada en los tribunales para un estudio psicológico y psiquiátrico, pero no asistió debido a problemas de salud. Ahora, es probable que no pueda realizar el peritaje este martes debido a su estado de salud. Si eso sucede, la Justicia podría dictar el sobreseimiento de los deportistas, como lo pidió la defensa hace al menos dos semanas.
Además, según los abogados de la denunciante, existen elementos de prueba que no fueron incorporados a la causa judicial, lo que podría echar abajo la investigación
La mujer habría escrito una carta el viernes donde acusaba a la justicia de Mendoza por no apoyarla y recibir una condena social.
"se notaba que iban a tener sexo" declaró en la causa una testigo clave
la semana pasada una testigo clave, brindó ante la Justicia su declaración y dio su impresión sobre lo sucedido la noche del 7 de julio pasado en una habitación de un hotel de la capital mendocina.
Hugo Araudou, el principal acusado, junto a su compañero Oscar Jégou, conoció a la víctima en la discoteca Wabi. Así, se dirigieron al hotel Diplomatic, donde el equipo francés se hospedaba tras derrotar a los Pumas. Viajaron en taxi, junto a otras dos personas más. La testigo, que había conocido a otro jugador francés, estaba a bordo del auto de alquiler.
Infobae, reveló que la testigo declaró: "“Creo que a mitad de la noche vimos a los franceses. Estuvieron bailando con nosotras, yo estuve con uno”, dijo, detallando su nombre. Cerca de las 5 AM, la mujer de Godoy Cruz y el jugador se retiraron de la discoteca, junto con Araudou y la presunta víctima, a la que había visto poco antes “a los besos con este chico”.
Así, las dos parejas abordaron el taxi hacia el hotel ubicado en calle Belgrano de la ciudad capital. En el vehículo “iban a los besos, y ella se iba riendo”, continuó. “Ya se notaba con qué intención iba”, continuó.
La testigo respondió: “Que iban a tener sexo” sentenció.
El representante legal de los rugbiers galos consiguió la libertad de ambos. Sin embargo, si bien pueden trasladarse libremente o radicarse en otra parte del territorio nacional, la justicia no les autorizó abandonar Argentina.