Una pareja fue detenida este miércoles por efectivos de la División Unidad Operativa Federal San Rafael, tras la denuncia de dos propietarios de un Complejo Hotelero y de cabañas “Valle Grande”. Todo comenzó luego de que las víctimas titulares de tarjetas denunciaron gastos desconocidos.
De la investigación surgió que los malvivientes realizaban estafas con tarjetas de crédito a nombre de otras personas por cifras millonarias y para no ser atrapados cambiaban sus rasgos fisionómicos utilizando pelucas.
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Uno de los denunciantes confesó que los estafadores, habían sido empleados de su Complejo desde fines del 2023, hasta principios del 2024, por los que tuvo que despedirlos ya que realizaron muchas estafas a sus clientes como también al Hotel en el que trabajaban, cuyas cifras superaban ampliamente un total aproximado de los 20 millones de pesos, situación ésta que oportunamente derivó en una denuncia penal.
Posteriormente, el Fiscal en turno, Dr. Javier Giaroli, tomó intervención dando inicio a actuaciones judiciales. A su vez, la brigada de la División Unidad Operativa Federal San Rafael, tuvo un rápido accionar, logrando así dar con el paradero de los denunciados, quienes tenían intenciones de retirarse de San Rafael en las próximas horas, por lo que el titular del Juzgado Penal Colegiado San Rafael, Dr. Claudio GIL, dispuso las detenciones tanto del hombre como de la mujer.
Mediante tareas de vigilancia, los pesquisas observaron que la mujer abordó un micro de corta distancia con destino a San Rafael, presumiéndose que lo hacía con intenciones de huir de sus víctimas o tal vez de las fuerzas policiales. Con la premura del caso, los uniformados interceptaron el recorrido de la mujer y lograron detenerla, casi de manera simultánea, se dirigieron hasta el complejo de cabañas en donde se encontraban alojados, para detener al hombre denunciado.
La particularidad del caso, se dio al momento de la detención del sujeto, ya que, con el fin de cambiar sus rasgos fisionómicos, utilizaba una prótesis capilar de los denominados “peluquín”, circunstancia que le permitía no ser identificado por sus víctimas y/o investigadores.