En respuesta a la creciente polémica por el reciente incremento salarial que beneficiaría a los senadores, la Cámara Alta ha decidido tomar medidas inmediatas para aplacar las críticas. En las próximas horas, se espera que el Senado vote a favor de congelar sus sueldos hasta el 31 de diciembre de 2024, desactivando temporalmente el aumento automático del 6,6% otorgado en julio y agosto a los empleados legislativos, con el que sus dietas estaban atadas.
Este movimiento, impulsado por la necesidad de aliviar la presión pública, contempla la suspensión de la actualización del valor del módulo que, desde abril, determina las dietas de los legisladores. Esta medida aplicará retroactivamente desde el 1 de agosto, impidiendo que los senadores disfruten del reciente aumento del 3,5% en julio y del 3% acumulativo en agosto.
Desde abril, los senadores han visto sus salarios estructurados en base a 2.500 módulos, con adicionales por gastos de representación y desarraigo que elevan sus ingresos brutos a más de 7 millones de pesos mensuales. Aunque la resolución suspenderá temporalmente estos aumentos, la controversia en torno al sistema persiste, especialmente considerando que en enero se reactivará el mecanismo que ellos mismos aprobaron.
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De aprobarse esta propuesta, el sueldo del Presidente quedaría fijado en 5,2 millones de pesos, mientras que los ministros y otros funcionarios de alto rango verían sus ingresos limitados a 15 salarios mínimos, equivalentes a cerca de 3,9 millones de pesos. Además, directores de empresas estatales, como YPF, tendrían sus salarios reducidos a nueve haberes mínimos.
La sesión de hoy también contempla la revisión de una resolución presentada por Luis Juez, líder del macrismo, que busca desactivar por completo la criticada resolución de abril que implementó el mecanismo automático de aumentos. Esta propuesta, sin embargo, podría quedar pendiente, ya que el foco principal es despejar la controversia inmediata en torno a los salarios de los senadores, al menos hasta fin de año.
Mientras tanto, la situación en la Cámara de Diputados es diferente. Bajo la dirección de Martín Menem, los diputados han visto incrementos salariales aprobados en tramos y sin la transparencia esperada, generando rumores de descontento y sorpresa, incluso entre las filas de Javier Milei, quien aparentemente aún no ha abordado el tema.