En una visita a Junín, para comentar sobre el protocolo de producción de cannabis medicinal, Sergio Moralejo, Subsecretario de Agricultura y Ganadería de Mendoza, estuvo reunido con el jefe comunal Héctor Ruiz, Ricardo Morcos, presidente del Honorable Concejo Deliberante; y Gustavo Gil, Director de Promoción Económica
Moralejo explicó los alcances del nuevo protocolo, que cuenta con un riguroso manual de procedimiento, garantizando la trazabilidad y calidad del producto, confiando en los mayores beneficios por su diversificación productiva y una sustitución de importaciones.
“Todos los productores de cannabis medicinal de Mendoza y quienes estén interesados en realizar inversiones en esta materia, tienen disponible el manual de procedimiento. Hizo falta dar un marco reglamentario a la ley y el decreto para producir cannabis en la provincia, para garantizar la trazabilidad, la transparencia en los procesos, la salud pública y la seguridad”, confió Moralejo.
“Todas las consultas y proyectos van a estar supervisados por la Unidad de Control, dependiente del Ministerio de Economía y Energía, a cargo de un equipo jurídico que trabajará coordinado con el Ministerio de Salud y el de Seguridad”, amplió.
De esta manera, cada proyecto deberá pasar los respectivos protocolos de Agricultura, de Salud, de Seguridad y del Iscamen, que controlará la sanidad vegetal. En la actualidad, el Ministerio de Salud prescribe cannabis medicinal en algunas patologías y debe ser importado por no contar con producción local.
“Se pretende diversificar la matriz productiva y la sustitución de importaciones. Además, todos los controles establecidos garantizan la calidad del producto. Podemos soñar con una industria farmacéutica local. Cada paso que vaya cumpliendo un productor quedará registrado dentro del sistema Ticket, para dar transparencia al proceso”, dijo a su turno Ruiz.
Vale recordar que el gobierno provincial reglamentó en marzo pasado la ley, donde, entre otras cosas, se ordenaba la creación de una Unidad de Control con un manual de procedimiento claro, enmarcado dentro de las leyes nacionales e internacionales y consensuado entre organismos científicos y expertos en salud.
El Ejecutivo consideró que debía otorgarse seguridad y certeza a quienes necesitaban los derivados del cannabis para el tratamiento de dolencias como cáncer, epilepsia, glaucoma, esclerosis múltiple, fibromialgia y dolor crónico, entre otros que están en investigación.
Producto de este trabajo en equipo, hoy está disponible el manual de procedimiento, que marca los aspectos legales y técnicos: desde cultivo hasta cosecha, transporte y empaque.
La reglamentación establece cómo será el trabajo coordinado de los ministerios de Economía, Salud y Seguridad, bajo la órbita de la Unidad de Control y Programa Provincial de Cultivo de Cannabis.