Manuel Merino, empresario de 59 años y hasta hoy titular del Congreso unicameral de Perú, se convertirá mañana en el Presidente de la República luego de que el pleno del Parlamento destituyera a Martín Vizcarra por “incapacidad moral permanente”
Merino, que prestará el juramento de práctica mañana a las 17 (las 19 en la Argentina), llega a la jefatura del Estado debido a que la compleja crisis política que vive Perú dejó al país sin los dos vicepresidentes que establece la Constitución.
La carta magna dispone que, en casos como este, el presidente del Congreso debe asumir interinamente la jefatura del Ejecutivo y llamar a elecciones “de inmediato”, aunque no precisa un plazo específico.
Al menos dos constitucionalistas peruanos opinaron esta noche que no tiene sentido acelerar el llamado a elecciones cuando ya están convocadas para el 11 de abril próximo.
“Aquí tenemos una situación sui generis pues ya hay una convocatoria a elecciones para abril; en todo caso, creo que el presidente del Congreso debe ratificar esa convocatoria y seguir el curso de ese proceso”, afirmó Oscar Urviola, expresidente del Tribunal Constitucional, según el diario limeño El Comercio.
En tanto, el profesor de derecho constitucional Samuel Abad dijo que “la razón de la norma es evitar que el presidente del Congreso se quede indefinidamente en la Presidencia de la República; en consecuencia, entendiendo la norma a la luz de la realidad, si ya se convocó a elecciones no tiene sentido que se vuelva a hacer”.
Merino pertenece a Acción Popular (AP), el partido centrista fundado en 1956 por Fernando Belaunde Terry, quien luego sería dos veces Presidente de la República, y fue congresista por el departamento noroccidental Tumbes en los períodos 2001-06 y 2011-16.
Volvió al Congreso en enero de este año, cuando se realizaron elecciones para escoger el Parlamento que debe completar el período hasta julio del año próximo, luego de que Vizcarra disolviera el anterior en septiembre de 2019, y el hecho de que AP ganara la banca más numerosa lo proyectó a la Presidencia del cuerpo.
De bajo perfil, quedó en entredicho y pidió disculpas públicas en septiembre pasado, después de que dos altos jefes militares informaran al Ministerio de Defensa que Merino los había llamado para procurar el aval de ambos al proceso de vacancia que estaba por debatir el Congreso y del que Vizcarra saldría airoso.
“Tal vez hacer una llamada en las circunstancias de ese día puede haber sido inoportuna, por eso yo le expreso mis sinceras disculpas a las Fuerzas Armadas”, dijo entonces Merino, que sin embargo rechazó la acusación de Vizcarra de que había conspirado para destituirlo y sucederlo.