Por escasa rentabilidad y tener que hacerse cargo de la plataforma, propietarios de quiscos anunciaron un paro
“Por la baja rentabilidad, tener que pagar por la plataforma, invertir nuestro dinero para tener carga, y a la falta de insumos: por el lapso de 168 horas no cargaremos”, se anuncia en los kioscos del centro de Mendoza, desde el 5 de noviembre y hasta el día 12 del mismo mes, cuando se cumpla el tiempo definido para el “Paro de SUBE”. En otros se pueden ver carteles que rezan que se sumaron al paro desde este lunes e igualmente hasta el 12 de noviembre, por lo que será muy difícil cargar la tarjeta para viajar en micro en los próximos días.
Según explicó Diego Ceballos, propietario de un quiosco: “El paro se debe a que la rentabilidad de la carga SUBE es negativa, es a pérdida. Nosotros tenemos que invertir un dinero antes de vender. Además, la empresa Carga Plus nos cobra por el servicio”.
Por otra parte, Gustavo Suárez, titular de la Cámara de Kiosqueros de la provincia, explicó que para poder cargar la tarjeta, un kiosquero debe invertir entre $30.000 y $60.000 inicialmente, o más, según la antena que desee tener, abonar gastos de internet, y costos de mantenimiento por el aparato de $800, más $10 diarios por el uso de la plataforma. A esto se le suman los insumos (cada rollo de papel para certificar la carga cuesta $800). “Si se venden $100.000, se ganan $1.000, y eso no alcanza ni para pagar internet. Mientras tanto la empresa (redistribuidoras de SUBE Buenos Aires) trabaja con el dinero del kiosquero, que debe depositar crédito para poder cargar, le paga recién a los 60 días, y le cobra por el servicio”, cerró.
No obstante, de acuerdo con el referente del sector, “la redistribuidora aumentó sus cotos, y Transporte no ha dado una respuesta”. “Los colegas dijeron basta, porque los cotos operativos superan ampliamente la rentabilidad (1%), y ya que las redistribuidoras solo buscan sacar provecho de quienes aceptan brindar el servicio, decidimos parar”, agregó.
Desde la Secretaría de Servicios Públicos, señalaron a diario Los Andes, que “es un problema entre un sector de los quiosqueros y la red de carga establecida para el sistema SUBE, que depende del Banco Nación”.
“Hemos intentado de buenos oficios acercar las partes para beneficio de los usuarios, y así evitar mayores inconvenientes con esa parte de los comerciantes (no es un problema generalizado, hay muchos comercios en el área metropolitana del Gran Mendoza que están activos sin problemas)”, agregaron.
Además, señalaron que para los usuarios la recarga está garantizada a través de los distintos Centros y Puntos de Atención, con opciones de carga segura, que tiene el sistema. Estos puntos forman parte de los más de 600 centros de atención, se pueden consultar en este link.