El Papa Francisco continúa evolucionando favorablemente en su estado de salud, mientras permanece en reposo en la Casa Santa Marta, dentro del Vaticano. Según el parte médico emitido este sábado, el Pontífice presenta una recuperación estable, con progresos tanto en su movilidad como en la función respiratoria.
Pese a que sigue convaleciente, el Santo Padre mantiene parte de su agenda pastoral y diplomática activa, aunque decidió delegar la conducción de la misa del Domingo de Ramos en el cardenal argentino Leonardo Sandri.
En el último informe, se precisó que Francisco aún utiliza oxígeno de alto flujo, aunque solo de forma residual y con fines terapéuticos. Además, los estudios de sangre más recientes arrojaron resultados positivos, lo mismo que la evolución del estado pulmonar, lo que refuerza las expectativas de recuperación. Sin embargo, su presencia en las liturgias centrales de la Semana Santa todavía está bajo evaluación.
Durante los últimos días, el Papa retomó algunas audiencias, recibiendo en la residencia a funcionarios clave de la Curia Romana, como monseñor Edgar Peña Parra, de la Secretaría de Estado, y el arzobispo Paul Gallagher, encargado de las relaciones exteriores del Vaticano. También recibió al rey Carlos III del Reino Unido y a la reina Camila, en una reunión que en principio había sido suspendida.
A pesar de las restricciones propias de su estado, el Papa manifestó su deseo de seguir en contacto con la comunidad religiosa. La Oficina de Prensa del Vaticano remarcó que “el hecho de que esté en recuperación no significa que no pueda salir”. De hecho, pidió que lo llevaran a la Basílica de San Pedro para rezar y saludar a los fieles, un gesto que fue interpretado como una muestra de fortaleza espiritual.