El economista y referente del Frente Renovador, que hoy ocupa el cargo de vicepresidente del Banco Nación, Matías Tombolini, pasó por Mendoza para ser parte de una serie de encuentro en el marco del 130° aniversario de la entidad financiera
“Tombo”, como es más conocido, dialogó con Jornada y Entorno Económico de algunos temas vinculados a la economía diaria y al alcance que pretende tener el Banco Nación en la provincia.
¿Cuál es la porción que representa hoy Mendoza para el Nación?
Mendoza es uno de las tres plazas más importantes que el Banco tiene, un 10% de las operaciones tienen que ver con la provincia y le hemos destinado el 10% de la asistencia financiera entre 2020 y 2021, más 53 mil millones de pesos.
Matías, definime la situación económica del país hoy
Si me preguntas, qué es Argentina, te puedo decir que es una enorme oportunidad, básicamente porque presenta características que dependen de ella y otras que no.
¿Oportunidad para quiénes?
Hoy hay un muy buen precio del dólar a nivel mundial y el precio de los comodities también ayuda. El tipo de cambio dio un julio y agosto récord en materia de exportaciones para el país. Mendoza, por su parte, tiene tres o cuatro características particulares, entre estas gente muy formada y empresarios maduros.
Un ejemplo claro de la posibilidad de exportar que tiene Mendoza se da con China, que en 10 años va a ser un mercado completamente diferente al de ahora. Después de que se debilitó el dólar para financiar el programa de expansión fiscal de EEUU, China no devaluó y no tiene competencia de monedas, lo que la ubica como un demandante de productos completamente distinto. Es una oportunidad para los empresarios, pero también para el estado que tiene que convertirse en un vendedor totalmente distinto a los que era. Hoy tenemos que potenciar los vínculos comerciales que tenemos y creo que, por ejemplo el vino es, así como el turismo, parte de los grandes vectores del desarrollo, porque genera dólares para el país.
Hace un mes presentaron un importante flujo de financiamiento para individuos. ¿Ahora tienen pensado nuevas líneas para sectores productivos?
El Banco tiene líneas de financiamiento a nivel general ofreciendo créditos a una tasa que es más o menos la mitad de la tasa de inflación, y eso tiene que ver con un modelo de desarrollo que ascendió durante la pandemia a $600 mil millones. Estos préstamos a pequeñas y mediana empresas durante la pandemia fueron en un marco de políticas de mitigación, hoy son de reconstrucción, y esas se asientan sobre vectores de desarrollo como la industria del conocimiento, pero también del agro-negocio. Estos vectores tienen acuerdos especiales y las pymes de Mendoza son destinataria de tasas preferenciales, como también los 5 mil millones de pesos para créditos personales con tasa preferencial para empleados del sector público que dimos en Mendoza.
Hoy el desarrollo de financiamiento transita por un mecanismo inverso al que tuvimos al que traíamos. Estamos en un proceso de escucha activa de los problemas que tiene las empresas. Muchas veces lanzamos un producto con un cupo especial para un financiamiento particular de un grupo de empresas.
En Mendoza tuvieron problemas serios vinculados a delitos informáticos. ¿Cómo los solucionaron?
Es una problemática acotada a un distrito en particular, trabajamos en concientizar a los clientes del Banco, lo que hubo fue una falla en la institución. Se le redituó a la gente en lo que había sido damnificada, pero después seguimos trabajando en cómo nos vinculamos a través de la tecnología en la asistencia financiera, que hoy es una combinación entre lo digital y lo personal.
Un dato de lo que cambió la relación con el cliente: si venías al Banco Nación a abrir una cuenta empresa antes de la pandemia tardabas entre 60 y 90 días, hoy tardas tres días. Todo ese proceso que tiene mucha digitalización entre medio requiere de hacer un Banco más ágil, pero también vincularnos con los clientes de un modo distinto.
¿Cómo está la relación del Banco Nación como agente financiero de la provincia?
Negociando mejores condiciones. La verdad que el endeudamiento de la provincia en los últimos 6 años, lejos de contraerse se expadió. Vos tenes una provincia que desde el 2015 en adelante no solo tuvo una contracción del Producto Brito Geográfico, empeoramiento de las condiciones de empleo, una caída de salario real, sino que además tuvo un incremento del endeudamiento. El banco Nación le ayudó, pero además cambió la moneda en la que esta expresada la deuda y eso es un problema porque la provincia genera recaudacion en pesos, por eso haber migrado la composición de la deuda provicial le quita grados de libertad a la política económica mendocina para desplegar programas de desarrollos que no estén tan tatado al valor del tipo de cambio.
El Banco es de todos, lo que es cierto que la provincia de Mendoza tiene un banco que esta para acompañarla. Pero también es cierto que es un banco que recibe depósitos de todo el país y protege los ahorros de todos los argentinos.