El presidente de la Cámara de Empresarios Mineros (CAEM), Roberto Cacciola, afirmó que el desarrollo de la minería es una gran oportunidad para el sector de las pequeñas y medianas empresas, durante el III Foro Metalmecánica Minería más Energía, que se realizó la semana pasada en Mendoza.
Cacciola no anduvo con vueltas y aportó números a esa expectativa: “Un solo proyecto minero puede llegar a contratar durante su construcción, que dura entre 3 y 5 años, unas 800 pymes y luego, durante su vida útil, alrededor de 600 más”.
El dirigente empresarial aseveró que “impulsar el crecimiento de los proveedores locales es esencial para el sector, ya que es un aspecto fundamental en la consolidación de la licencia social”.
De esta forma, el titular de la cámara que reúne a las principales empresas mineras en la Argentina, resaltó el efecto multiplicador que tendría la explotación minera sobre la economía local, poniendo fuerte el acento que no sería solo un negocio de corporaciones, sino que pondría a marchar a todo vapor a las pymes mendocinas o de Cuyo.
En ese sentido, Cacciola elogió el trabajo que está haciendo el Gobierno de Mendoza, que ha puesto en marcha el distrito minero de Malargüe con el fin de dar el puntapié inicial a decenas de proyectos para explotar cobre y otros metales que hoy demandan la transición energética en el mundo.
También celebró que el Congreso Nacional haya aprobado el RIGI, Régimen de Incentivo de Grandes Inversiones, que brindará beneficios a aquellas inversiones mayores a 200 millones de dólares.
En ese mismo encuentro, el ministro de la Producción de Mendoza, Rodolfo Vargas Arizu dejó muy claras las ambiciones de la provincia en la voz del actual gobierno: “En el caso de la minería, ya no se trata de un crecimiento moderado, sino de un impulso muy importante y en 20 años podemos convertirnos en un jugador internacional de relevancia”.