Después de dos años y como habitualmente lo hacía, CECIM, la cámara de empresarios independientes de la construcción de Mendoza, celebró un nuevo periodo de trabajo, de logros compartidos y por los futuros proyectos. Esta vez, con una cena de la que participaron más de cien personas entre funcionarios de gobierno, asociados, empresarios del rubro y amigos, en La Vacherie Country Golf, en Luján de Cuyo.
El ministro de Planificación e Infraestructura de Mendoza, Mario Isgró; la presidente del Instituto Provincial de la Vivienda, Maria Marta Ontanilla; y el subsecretario de Infraestructura Escolar, Guillermo Carbonell fueron, entre otros tantos invitados, los funcionarios provinciales que acompañaron a los empresarios de CECIM y a su flamante presidente, Lic. Dalmiro Barbeito.
Fue justamente Barbeito, en su primer discurso en su cargo, quien dejó claro algunos puntos que refieren a la actividad de la construcción y específicamente a cómo los encuentra hoy su profesión en el marco de post pandemia. Además, hizo el balance en su primer cuatrimestre al frente de la agrupación y destacó, entre otros desafíos, “la generación de un escenario de crecimiento, ya que las empresas sanas ayudan a ejecutar proyectos en forma más eficiente”.
También, le solicitó al ministro Isgró que la cámara y el gobierno deben trabajar en forma conjunta para evitar la sub ejecución de partidas presupuestarias del presupuesto de obras públicas; un desafío a transitar si se colabora desde el mismo lugar. Por otro lado, hizo hincapié en el escenario económico actual, donde hay grandes dificultades con una economía poco competitiva, con altas tasas de interés, poco acceso a créditos blandos, y una presión impositiva que agobia a las empresas. Barbeito propuso acortar los plazos de pago a los contratistas lo que ayudaría a bajar los costos financieros y se vería reflejado en la cadena de valor.
“Es importante destacar que las empresas han tenido durante la pandemia dificultades en la provisión de materiales, insumos, repuestos, grande problemas logísticos, que han afectado la ejecución normal de las obras. Creemos que hay que articular la reprogramación de las curvas de avance de obra, eximiendo de multas a las empresas contratistas y, sobre todo, procurar que las redeterminaciones de precios no se vean afectadas por un escenario de inflación creciente”, dijo.
Un 2021 complicado para todos los sectores, en el que el de la construcción no fue la excepción. Sin embargo, la proyección en positivo es algo que siempre ha caracterizado a los integrantes de CECIM y así lo dejó enfatizado también Barbeito.
“Valoramos el espíritu emprendedor que tiene Mendoza, el cual nos ha caracterizado como empresarios que apuestan a la producción, a pesar de las circunstancias. Las PyMES constructoras somos el brazo armado que tiene tanto emprendedores privados como el Estado a la hora de imaginar sus políticas de inversión. No es usual el nivel de profesionalismo y competitividad que existe en Mendoza. La infraestructura de la provincia se ha construido con empresas locales y estamos preparados para mayores desafíos”, concluyó.
Para resaltar, en su discurso el empresario local también recordó los orígenes de la cámara y algunos números importantes.
Por un lado, comentó que la cámara se conformó durante la crisis más importante que atravesó el país, haciendo referencia a la de 2001. “Decidimos convocar a las Pymes constructoras para buscar la salida de un escenario que nos costaba sobrellevar. Hoy, después de andar casi dos décadas, somos la cámara del sector de la construcción con más empresas asociadas y miembros en los 18 departamentos de Mendoza”.
Por el otro, expresó que las empresas asociadas a CECIM contratan el 80% de la obra de arquitectura que el estado provincial ejecuta, y contribuyen activamente con la competitividad y ejecución de todas las obras de infraestructura pública y privada que se ejecutan en Mendoza.
A su turno, el ministro Mario Isgró resumió la labor realizada a dos años de su asunción y destacó la buena predisposición de la CECIM cuando el gobierno tomó la decisión de destinar fondos para salud a raíz de la pandemia y no a obras.
“Este año, con un presupuesto ordenado, pudimos retomar varias obras que estaban ralentizadas y otras nuevas. Se hizo un trabajo fuerte para poner en régimen las obras y hay un compromiso asumido para seguir trabajando para que venga un 2022 mejor”, dijo a todos los empresarios presentes y agregó: “Hemos estado sacando obra pública nueva, en escuelas, hospitales y estamos terminando 2021 con muchas licitaciones, comparado con lo que se venía trabajando”.
El adiós a un amigo y empresario de la construcción
Antes de comenzar sus palabras, Dalmiro Barbeito y en nombre de todos los asociados de la cámara, se refirió al reciente fallecimiento del ingeniero Antonio Nasif, un participante incansable en la agrupación y “un excelente profesional y mejor amigo”, según sus propias palabras.
“Tonio fue una persona impecable; siempre tuvo una actitud positiva y su palabra era escuchada con atención. Cuando no podíamos encontrar la salida, esperábamos su intervención para que nos diera un punto de vista que no habíamos alcanzado. El camino más sencillo; esa era su cualidad, el camino que nadie podía ver. Lo recordaremos siempre con alegría”.