Luego de haber reestructurado su millonaria deuda; cambiar de dueño y lograr que el Estado nacional ingresara a su capital, ahora IMPSA prepara un plan para vender parte de sus acciones en el mercado bursátil. Así lo reveló el portal iProfesional.
Según este medio, la decisión fue tomada durante una asamblea de accionistas de la metalúrgica mendocina, que se llevó a cabo este 28 de abril y en la cual se autorizó al directorio para que solicite el ingreso de la ex compañía de la familia Pescarmona al régimen de oferta pública de acciones regulado por la Comisión Nacional de Valores (CNV), para el listado de una o más clases de sus acciones, tal como ya se había acordado cuando la empresa fue capitalizada.
Si bien no se conocen más detalles sobre la cantidad de acciones que se lanzarán, ni el precio con el que serán ofrecidas, ni cómo quedaría integrado el capital accionario luego de esta propuesta, lo concreto es que la decisión se enmarca en el cumplimiento de todo el esquema financiero que los ejecutivos de la compañía elaboraron cuando presentaron ante la Justicia su plan de reestructuración.
De hecho, se trata del segundo intento de IMPSA por colocar acciones en el mercado bursátil mediante este mecanismo. El primero fue durante el 2021, cuando no tuvo éxito, ya que el fideicomiso de acreedores no aceptó adquirir las acciones.
En cambio, logró que el gobierno nacional y el de la provincia de Mendoza inyectaran en conjunto u$s20 millones, lo que los convirtió en los principales accionistas de la firma metalúrgica.
En ese momento, el desembarco estatal fue liderado por el exministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, quien acordó que el Estado nacional compraría una participación accionaria del 63,7%, mientras que Mendoza se quedó con el 21,2% de las acciones.
El porcentaje restante (15,1 %) permanece en manos privadas, correspondiendo un 9,8% al fideicomiso de acreedores y otro 5,3% para el fideicomiso de la familia fundadora.
La capitalización le permitió a IMPSA recomponer su capital de trabajo y avanzar en la consolidación de su operación en Argentina y volver a competir en los mercados internacionales.
Cuando el gobierno nacional y la provincia de Mendoza tomaron el control de IMPSA, el directorio aprobó la formación de un comité de auditoría como paso previo a su proceso de ingreso al mercado bursátil.
Ocurre que legalmente, para que pueda negociar acciones en el mercado de valores, entre otras cosas, un paso que se requiere es que se establezca un Comité de Auditoría.
La conformación de este comité el 22 de marzo pasado, tuvo como objetivo de darle más transparencia a la empresa y le permitirle cotizar en la bolsa de valores.
«Cumplo en informar que el Directorio dispuso implementar la creación del Comité de Auditora y la designación de los miembros, resolviéndose durante la primera reunión de dicho Comité, celebrada el 22 de marzo de 2023, que la composición será la siguiente: Pablo Magistocchi es el presidente del comité; Pablo Portuso es el vicepresidente; y Gabriel Vienni es el vocalista del comité», informó IMPSA en su momento a la CNV.
El establecimiento del Comité de Auditoría brindará «mayor transparencia» según IMPSA, que también reconoció que «es algo que se necesita para cotizar en Bolsa» y agregó que «la idea de cotizar en Bolsa es algo que se decidió desde la capitalización».
Tal como enfatizó la metalúrgica en varios de sus balances anuales, el comité de auditoría «implicará una mejora en la calidad organizacional y contribuirá a continuar el camino iniciado en pos de adoptar las mejores políticas de Gobierno Corporativo a nivel nacional e internacional, así como una mayor transparencia y control de gestión».
«Además, permitirá a la Sociedad avanzar en la adecuación de sus estructuras, formas de actuación y políticas internas a las requeridas por la Ley de Mercado de Capitales, facilitándose así la transición hacia el cumplimiento de las exigencias necesarias para su futuro ingreso al régimen de oferta pública de acciones», dijeron en informes anteriores a la CNV.
¿Cómo fue el rescate financiero de IMPSA?
IMPSA logró cerrar su Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE), que fue homologado por el Juzgado interviniente en la causa, el 14 de abril del 2021.
Del mismo modo, el dinero aportado por el Gobierno le permitió continuar con su plan de recomposición de la estructura de capital, que se inició con la reestructuración de la deuda y continuó con la asistencia oficial primero con el sistema ATP y luego con el «Programa de Asistencia a Empresas Estratégicas en proceso de Reestructuración de Pasivos» (PAEERP), mediante el cual se pagó el 75% de los salarios de los trabajadores de la empresa, hasta diciembre del 2020.
También completó el canje de los bonos internacionales con vencimiento en el 2025 por u$s182 millones, por nuevos títulos sin oferta pública que vencerán en el 2036.
Producto del canje y de la emisión de los nuevos bonos IMPSA ha procedido a la cancelación total de los títulos en circulación, a la vez que firmó nuevos contratos de préstamos con la Corporación Andina de Fomento (CAF) y con el Banco Hipotecario que reemplazan a los créditos con dichas entidades alcanzados por el APE.
Esta operación se suma a la concreción, a comienzos de diciembre del 2021, del canje de una serie de Obligaciones Negociables (ON) existentes y la entrega de nuevos títulos Clase VII emitidas en el marco del Programa Global de Emisión de Obligaciones Negociables de IMPSA.
La empresa también logró firmar otros contratos de préstamo bilaterales que reemplazaron a los préstamos alcanzados por el APE que habían sido cerrados con Export Development Canada (EDC); el Banco Interamericano de Inversiones (BID) y la Corporación Interamericana de Inversiones.
En esa oferta, IMPSA apuesta a reestructurar u$s536 millones entre capital e intereses de la denominada «deuda elegible» (que se pudo comprobar) que no incluye las obligaciones pendientes con organismos estatales, como Anses o AFIP, lo que se conoce como «deuda excluida».
La propuesta mezcla una serie de instrumentos financieros para cancelar sus cuentas como Obligaciones Negociables (ON), con oferta pública denominadas en dólares; nuevo bono internacional también en dólares y nuevos préstamos millonarios.
Además, contempla la emisión de bono en dólares, con un interés anual del 1,5%, cuyo capital comenzaría a pagarse en el 2028 en nueve cuotas anuales que se extenderán hasta el 2036. También se comprometió al ingreso al régimen de oferta pública a partir de esta emisión de acciones Clase C para permitirle a los actuales beneficiarios de los fideicomisos de la venta de sus tenencias en el mercado.
Fuente: iProfesional