Este lunes, los usuarios de Mercado Pago fueron recibidos con una noticia inesperada al ingresar a sus cuentas. Un aviso en la plataforma anunciaba que ya no se aplicarían retenciones de IVA y Ganancias en los cobros online, sin importar el número de operaciones mensuales. Esta modificación se debe a la reciente Resolución 554/2024 de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), publicada en el Boletín Oficial el 21 de agosto, la cual establece la eliminación de estas retenciones para los pagos realizados a través de medios electrónicos.
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La resolución es parte de las Medidas Fiscales Paliativas y Relevantes, que entraron en vigencia el domingo 1 de septiembre. Según la normativa, las entidades que administran tarjetas de débito, crédito y otros medios de pago electrónicos, así como los bancos y procesadores de pago, solo podrán realizar retenciones impositivas si las autoridades tributarias nacionales lo disponen y únicamente si los montos procesados superan las 10.000 Unidades de Valor Adquisitivo mensuales por contribuyente.
Este cambio representa un alivio significativo para los usuarios de plataformas de pago electrónico, quienes ahora podrán realizar sus transacciones sin las retenciones automáticas que hasta ahora eran una constante. La medida no solo busca simplificar las operaciones, sino también fomentar el uso de medios digitales en un contexto donde la economía argentina está en plena transformación.
Con esta nueva disposición, el Gobierno apunta a facilitar la actividad económica digital, impulsando un mayor dinamismo en las transacciones y reduciendo la carga fiscal inmediata sobre los contribuyentes que operan a través de estas plataformas. La eliminación de las retenciones de IVA y Ganancias en los cobros online se enmarca en un esfuerzo por modernizar el sistema tributario y adaptarlo a las realidades del comercio electrónico.
Este anuncio ha sido recibido con entusiasmo por parte de comerciantes y usuarios frecuentes de Mercado Pago, quienes ven en esta medida una oportunidad para operar con mayor libertad y menos presión fiscal. La expectativa ahora se centra en cómo esta normativa impactará en el volumen de transacciones y en el comportamiento de los consumidores en un entorno cada vez más digitalizado.