Las imágenes del impactante tiro libre que Franco Mastantuono transformó en un golazo de nivel premium recorren el mundo y seguirán marcando tendencia en la masividad de las redes sociales.
No es infrecuente marcar un gol de pelota parada para algún especialista en la materia, pero el nivel de precisión más potencia que partió del botín izquierdo del armador riverplatense ya está valorado como si fuera un hecho artístico y no solamente deportivo.
Los 28 metros de distancia con el arco, más la parábola que recorrió el balón hasta ingresar en la valla defendida por Agustín Marchesín parecen, además, producto de una edición de tinte cinematográfico.
A sus 17 años de edad, no es ocioso ni fuera de lugar catalogar como joya futbolística a esta aparición fulgurante en el fútbol argentino, en modo diamante en bruto que se sigue puliendo sin prisa pero también sin pausa.
Te puede interesar
Y aquí es donde conviene abrir un paréntesis que incluya signos de interrogación, porque en el horizonte cercano se puede inferir que instituciones poderosas del fútbol europeo estén dispuestas a pagar la cláusula de rescisión para quedarse con el pase, aún a la edad temprana que tiene este producto de las divisiones inferiores de River Plate.
A los 17 años, también, Lamine Yamal - cumplirá 18 en julio próximo- rompió los moldes tanto en el Barcelona como en la Selección de España que obtuvo la Eurocopa 2024.
A esa misma edad lo hacían Diego Maradona y Lionel Messi, por lo que en todos los casos se rompen con los manuales de quienes consideran que el jugador debe rozar los veinte años para que se empiece a amoldar al rigor del fútbol profesional.
Mastantuono, quien ya tuvo experiencias en el pasado Sudamericano Sub 20, inclusive no habiendo sido titular, es fija para que sea convocado por Lionel Scaloni con miras a la próxima doble fecha FIFA por las eliminatorias sudamericanas, que se disputarán durante junio ante Chile y Colombia.
Un secreto a voces, que se ha expandido en cercanías al cuerpo técnico del seleccionado nacional y que conviene asumir como un hecho tan esperable como factible.
Cabe recordar que, en ocasión del triunfo por 4-1 de la Selección Argentina sobre su par de Brasil en marzo pasado, periodistas y analistas brasileños comentaban que en la tierra del pentacampeón mundial se había generado un proceso inverso a lo tradicional: juveniles talentosos rápidamente transferidos al viejo continente y que perdían las características de habilidosos y creativos debido a que se los automatizaba al juego de "control y pase", con lo que iban perdiendo frescura, atrevimiento y gambetas desequilibrantes ante la marcación rival.
Te puede interesar
Hay que confiar en que entrenadores e instructores, tanto en la figura de Marcelo Gallardo, como en la de Diego Placente con los juveniles y cada miembro del cuerpo técnico de la "Scaloneta", logren preservar el talento natural de esta figura surgente en la banda roja, quien, en el próximo mercado de pases europeo, muy presumiblemente contará con ofertas para egresar hacia algunas de las ligas top a nivel ecuménico.
Mientras, a disfrutarlo sin distinción de camisetas. Y a imaginarlo, desde ya, como uno de los que se ubicarán en el corto y mediano plazo en la primera línea de los potenciales sucesores que asomarán cuando Leo ya decida ponerse plazos a sí mismo.