En una medida que se venía gestando desde hace tiempo, el Comité Olímpico Internacional (COI) decidió dejar al boxeo fuera del programa de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. Aunque la noticia aún no ha sido oficializada, la Agencia Reforma informó que el COI ya comunicó su decisión a los Comités Olímpicos Nacionales de todo el mundo.
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Este desenlace no es inesperado, ya que desde hace varios años el COI y la Asociación Internacional de Boxeo Amateur (AIBA) han tenido roces importantes. En 2023, el COI decidió desconocer a la AIBA como ente rector del boxeo olímpico debido a una serie de irregularidades financieras, estatutarias y técnicas, además de acusaciones de corrupción. Desde entonces, el propio COI se hizo cargo de los torneos clasificatorios para París 2024 y la organización del boxeo en los Juegos Olímpicos de ese año.
La exclusión del boxeo de los Juegos de 2028 representa un golpe duro para un deporte que ha sido parte del programa olímpico desde 1904. Por ahora, no está claro si el COI reconsiderará su decisión o si buscará una nueva federación que pueda reemplazar a la AIBA en la organización del boxeo amateur.
Argentina: la caída del boxeo olímpico
Para Argentina, la decisión del COI llega en un momento especialmente delicado. El boxeo es el deporte que más medallas ha dado al país en la historia de los Juegos Olímpicos, con un total de 24, lo que representa el 31,16% del total de preseas argentinas. Sin embargo, en los Juegos de París 2024, por primera vez desde 1924, Argentina no tuvo representantes en el cuadrilátero.
El último podio argentino en el boxeo olímpico fue el bronce de Pablo Chacón en Atlanta 1996, lo que significa que ya pasaron 28 años sin subir al podio, la misma cantidad de tiempo que había pasado desde el bronce de Mario Guillotti en México 1968.
A pesar de las oportunidades que tuvieron los púgiles argentinos en los Panamericanos de 2023 y en los clasificatorios de Italia y Tailandia en 2024, ninguno logró asegurar un lugar en París. Este declive marca el fin de una era para el boxeo argentino, que brilló con siete medallas doradas entre 1928 y 1948, pero que desde entonces ha quedado lejos de sus días de gloria.
Ahora, con el futuro del boxeo olímpico en duda, se abre una nueva incógnita sobre qué camino tomará este deporte, no solo a nivel global, sino también en Argentina, donde los guantes solían ser sinónimo de éxito.
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