Con autoridad, Gimnasia y Esgrima se consagró campeón del cuadrangular internacional por la Serie Río de la Plata, en un duelo que se disputó en el Estadio del Parque Viera, de Montevideo.
El Lobo jugó en inferioridad numérica desde los 24' del primer tiempo debido a la expulsión de Diego Mondino por exceso verbal.
Con un trabajo táctico muy preciso en la zona de volantes, el mensana cerró su zona defensiva y lateralizó para salir jugando por la bandas en modo desahogo.
Así, con diez jugadores y de visitante, los conducidos por Diego Pozo estuvieron a la altura de las circunstancias y fueron dignos del logro conseguido.
Gimnasia se cargó de amarillas rápidamente durante la etapa inicial frente a un adversario que movió el balón a la búsqueda de grietas en la defensa rival y que no encontró.
Es más, Montevideo Wanderers solamente tuvo una acción neta a los largo de los 90', a través de un cabezazo de Uribazo que Giovini desvió con una reacción exacta.
Con el correr de los minutos, el local se fue apagando y el equipo mendocino comenzó a poblar el campo adversario con un manejo prudente de la pelota.
A poco del cierre, llegó el muy festejado tanto gimnasista: Romano bajó un envío alto hacia el área chica y Tadeo Marchiori, en dos tiempos, aseguró el destino del remate para marcar el único tanto del cotejo.
A festejar, Lobo...que bien merecido está.