Boca pasa un momento delicado desde lo deportivo, que es consecuencia de lo institucional, en un club que a veces parece acéfalo, con un Juan Román Riquelme a cargo del fútbol pero rodeado de integrantes de un Consejo de Fútbol que en Brasil demostraron ser más patoteros que dirigentes. ¿Y Amor Ameal?
Y eso se traslada al campo de juego, con un equipo que no transmite nada, que solo suma puntos porque tiene jugadores de jerarquía pero que por rendimientos debería estar peleando en lo más bajo de la tabla de posiciones.
El partido de este miércoles es la muestra clara de lo que es Boca, que mereció perder holgadamente ante Godoy Cruz pero por apenas unos centímetros (un gol de posición adelanta de Villa) no lo terminó ganando.
Durante el partido contra Godoy Cruz los hinchas explotaron y cantaron contra los por ahora dirigidos por Sebastián Battaglia: "Jugadores, la c.... de su madre, a ver si ponen huevos que no juegan con nadie", fue el grito de guerra.
Otra parte de La Bombonera optó por seguir alentando al equipo y en otros sectores hubo piñas en plena tribuna durante el partido.