El represor de la última dictadura militar Miguel Osvaldo Etchecolatz murió este sábado a los 96 años en un centro clínico de la localidad bonaerense de Merlo, donde estaba internado bajo custodia policial.
La información fue confirmada por el Tribunal Oral Federal número 5 a Guadalupe Godoy, una de las abogadas que lideró la querella contra el genocida en la causa por la desaparición de Jorge Julio López.
Miguel Etchecolatz fue director de investigaciones de la Policía Bonaerense durante la dictadura y había sido condenado ocho veces por secuestros, torturas y crímenes junto a un grupo de militares acusador de someter a al menos 84 personas.
En mayo de este año, Etchecolatz había recibido su última condena a prisión perpetua junto a otro ex policía Julio César Garachico. Ambos acusados de haber secuestrado y torturado a siete víctimas y haber asesinado a otras tres en el centro clandestino de detención conocido como “Pozo de Arana”.
La sentencia fue dictada el 13 de mayo pasado por el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata. Las acusaciones contra ellos habían sido sostenidas por el sobreviviente Julio López, antes de desaparecer en plena democracia hace 15 años.
“Es un asesino serial, no tenía compasión”, había dicho López sobre Etchecolatz ante el tribunal cuando también identificó a Garachico, ambos como sus torturadores, y dio detalles de los tormentos a los que fueron sometidos él y otros prisioneros y de los homicidios que presenció.