Cuando a Wanda Nara le llegó la propuesta para conducir la nueva temporada de MasterChef sabía que el desafío implicaba mucho más que trabajar en la televisión argentina.
No se trataba solo de pensar en su carrera profesional sino también en su vida familiar y cotidiana ya que lleva más de 16 años viviendo en el exterior: estuvo en Italia, Francia y ahora acompaña a su esposo, Mauro Icardi, que se encuentra jugando en el club Galatasaray de Estambul, Turquía.
De ante mano, debía instalarse en Buenos Aires, lógico. Y si bien sería por algunos meses, siempre supo que no lo haría sola ya que no estaba dispuesta a alejarse demasiado de sus cinco hijos: es madre de Valentino, Constantino y Benedicto -de su relación anterior con Maxi López- y de Francesca e Isabella -de su matrimonio actual con el futbolista rosarino-.
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De esa manera, habló con su marido para reorganizar la logística y que el cambio afectase lo menos posible sobre todo la escolaridad de los chicos. Así, encontraron la forma más efectiva: los tres varones continuarán con los estudios que empezaron en una escuela de Europa -a la distancia, como lo hicieron cuando se mudaron de Milán a París, y ahora a Estambul-, y también irían de manera presencial a un colegio argentino; mientras que las niñas harían lo propio en Turquía, con acompañadas por Mauro Icardi, quien también va y viene con ellas para acompañar a su familia en Buenos Aires sin descuidar su compromiso con el club Galatasaray.
En una entrevista a Infobae, le preguntaron a la conductora principalmente por sus cinco hijos e hijas, por la doble escolaridad que tienen: "Mis hijos van al colegio acá. Y además siguen a la distancia la misma escuela que hacen sus hermanas. Tienen clases online todos los días con la escuela de Europa adaptadas al horario argentino".
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Y la periodista refutó: "Si ya lo están haciendo acá al cole, ¿por qué en Europa también?" a lo que la empresaria sumó: "Porque ya habían empezado en Europa el año escolar. Porque tienen la posibilidad, porque tienen una mamá un poco exigente, y porque creo que lo mejor que les puedo dejar es una buena educación".
Además, le consultó por su maternidad: "¿Tus nenas no están con vos? ¿Cómo aguantás, que sos tan madraza?" y ella contestó: "Van y vienen con su papá. Es poquito tiempo y volvemos a estar todos juntos. Pero así nadie está solo. Mauro está todo el día con ellas, entrena cuando van al cole. Y yo trabajo cuando los varones van al cole. En este período la que más está fuera de casa soy yo y Mauro me está ayudando mucho".
Entre las preguntas de sus hijos, también surgió la del deseo de tener un sexto en su familia y finalizó: "Este día dije “mi última bebita, Isi”. Hoy sí me veo con uno más. Teléfono, Mauro".