Hace ya varias semanas que la casa de Gran Hermano se fue llenando de sorpresas y alegría para los participantes. Primero, entraron los familiares y se quedaron alrededor de una semana conviviendo con ellos. Luego, cada uno de los jugadores recibió otra visita especial pero solo por una hora. En el caso de Marcos Ginocchio, el primer finalista del reality, cruzó su padre la puerta del SUM y lo emocionó hasta las lágrimas.
“Te quiero con tada mi alma y todo mi corazón. Te traigo el abrazo de tu mamá y sabés que a ella no le gustan las cámaras”, fueron las palabras de José Ginocchio para con su hijo. En esa gala, le mostraron a Marcos dos videos con emotivos saludos: Uno de su madre y otro de su hermano, que no pudo viajar para estar presente en la casa de Gran Hermano.
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A pesar de que no pudo reunir a toda la familia Ginocchio, Santiago Del Moro logró sorprender nuevamente a Marcos: "Yo te debo algo a vos. Como sos el primer finalista hay que darle un reconocimiento al primer finalista del certamen. Anda al box de intercambio a buscarlo. Por ahí está en el sum".
Ahi nomás, Marcos fue corriendo al sum y se quedó helado al ver a José, su hermano que vive en Estados Unidos y que viajó especialmente para poder verlo después de un año sin verse.
Apenas lo vio, el salteño quebró en llanto y fue corriendo a abrazar a su hermano. Su padre, José, que estaba en la tribuna, dejó caer lágrimas de emoción al ver el tan esperado reencuentro de sus dos hijos.
"No puede ser, ¡por Dios! No lo puedo creer", expresó Marcos, quien no pudo dejar de abrazar a su hermano por varios minutos. "No puedo creer estar acá después de verte en la tele por meses. Caí del avión ayer a la noche, perdón que no pude estar el jueves", expresó José.
Luego, José le dijo que está haciendo todo lo posible para que lo dejen quedarse en el país hasta la final, ya que está becado en los Estados Unidos: "Lo que sea para verte, hermano".
"Son pocas las veces al año que lo veo y en esta época menos... porque es la época en la que él está a tope con la universidad. Es muy poco el tiempo que estoy con el cuándo lo veo porque él también hace muchas cosas en Salta. No lo puedo creer", le dijo Marcos a Santiago Del Moro en vivo.
Cuando llegó la hora de despedirse, José le dedicó unas tiernas palabras a Marcos: "Sos un orgullo para nosotros. Me cruzo allá con argentinos en cualquier parte y me preguntan por vos. Se me infla el pecho del orgullo de decir que sos mi hermano. Te amo, te extraño más que nunca. Este fue un regalo enorme de la producción, tenerte en la pantalla al menos un rato. El hecho de sentarme y ver la televisión y ver qué estás haciendo. Me hubiese encantado poderlo hacer desde que me fui de Argentina. Voy a intentar quedarme hasta la final".
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