En un inesperado gesto, el economista y político Javier Milei ha sorprendido a los técnicos del Fondo Monetario Internacional (FMI) que siguen de cerca la situación económica de Argentina.
Según informó LPO, durante una reunión virtual con el FMI, Milei expresó su apoyo al desembolso inmediato de los 7.500 millones de dólares acordados con el Fondo, los cuales el Ministro de Economía, Sergio Massa, cerró en Washington.
La declaración de Milei dejó perplejo al chileno Rodrigo Valdez, principal autoridad del FMI en estas conversaciones, quien esperaba que los representantes del movimiento libertario mantuvieran una postura más rígida que la de los economistas del partido Juntos por el Cambio.
Según información proveniente del Ministerio de Economía, se sugiere que los economistas de Juntos por el Cambio habrían pedido al FMI que no efectuara el desembolso comprometido en el "staff level agreement".
Aunque es habitual que el FMI consulte a las principales fuerzas políticas de la oposición, es importante destacar que estas opiniones no necesariamente influyen en las decisiones tomadas por el organismo, según un funcionario argentino con experiencia en negociaciones con el FMI.
La noticia de estas conversaciones llegó rápidamente a Sergio Massa con un nivel de detalle que suscita interés, según fuentes cercanas al Palacio de Hacienda.
Este episodio revela una serie de paradojas políticas. Aunque Massa busca polarizar con Milei como antagonistas, la verdadera tensión de poder se encuentra con la coalición Juntos por el Cambio, en especial con el partido macrista.
No obstante, en el seno de la agrupación "Unión por la Patria", se ha instalado la idea de que la candidatura de Patricia Bullrich está destinada a fracasar, respaldados en encuestas recientes como la de CB Consultores. Se sostiene que el eventual balotaje será entre Massa y el candidato libertario.
Se comenta que Massa está convencido de que si Patricia Bullrich queda fuera del balotaje, el radicalismo comenzará un proceso de ruptura al día siguiente de las elecciones generales de octubre. En "Unión por la Patria", se especula que el radicalismo no permitirá que el PRO negocie en su nombre.
El diagnóstico electoral tiene un vínculo directo con el viaje de Massa a Washington. El ministro es también candidato, y las elecciones y el futuro inmediato del país se encuentran bajo la sombra del acuerdo con el FMI. En caso de ganar las elecciones, Massa ha manifestado su intención de renegociar el acuerdo después del balotaje.
La relación entre la negociación con el FMI y la lucha electoral es innegable. La victoria de Milei en las PASO provocó un impacto en los mercados que amenazaba con desestabilizar al Banco Central, lo que llevó a una devaluación urgente del peso, medida impuesta por el FMI y programada inicialmente para el viernes posterior a las PASO. Massa se apresuró a mostrar su imagen junto a Kristalina Georgieva, Directora Gerente del FMI, el mismo miércoles en que el organismo liberará los 7.500 millones de dólares a Argentina.
La situación política y económica continúa entrelazándose. Massa congeló el tipo de cambio en 350 pesos hasta mediados de noviembre, cuando aplicará un ajuste acorde a la inflación de octubre, menos un punto. Este enfoque busca evitar que el "crawling peg" resulte inflacionario. La negociación con el FMI se enfoca en herramientas para controlar la fluctuación del dólar, ya que su volatilidad puede llevar a la Argentina de la estabilidad al caos en cuestión de momentos.
Mientras Massa trabaja en la implementación de medidas para preservar el poder adquisitivo y mantener la actividad económica, su equipo busca mantener el gasto dentro de los límites del acuerdo con el FMI.
En agosto, se espera un aumento significativo de la inflación debido a la escalada del dólar y la devaluación, pero se confía en que los acuerdos de precios ayudarán a mitigar el impacto. La expectativa es que la inflación disminuya en octubre y noviembre.
El viaje relámpago de Massa a Washington, sus conversaciones con el FMI y la interacción con el proceso electoral conforman un escenario complejo y entrelazado que define el rumbo de Argentina en los próximos meses.