Un grupo de seguidores del equipo chileno Colo Colo, quienes estaban detenidos en Mendoza por diversos incidentes, han sido puestos en libertad. Sin embargo, su liberación se produjo después de que admitieron su participación en un acto de agresión y robo contra un equipo de Canal 7, por lo que fueron condenados y expulsados del país de manera permanente, según informaron fuentes judiciales.
Inicialmente, estaba programada una audiencia judicial para este lunes, en la cual la abogada de los chilenos Mauricio Herbert Molina (24), Ignacio Baltazar Maulen (23) y Daniel Alejandro Maulen (29) había solicitado la liberación de sus clientes. No obstante, a último momento, la abogada María Belén Idemi llegó a un acuerdo con el fiscal de la causa, Daniel Sánchez Giol, para resolver el caso mediante un juicio abreviado.
Los tres integrantes de la hinchada conocida como la Garra Blanca, aceptaron haber agredido al equipo periodístico de Canal 7 y haberle robado un micrófono que utilizaban para su trabajo. Como parte del acuerdo, fueron condenados a tres años de prisión en suspenso, lo que les permitió recuperar su libertad, aunque con la condición de ser expulsados del país.
Después de la sentencia dictada por la jueza Érica Sánchez, agentes de la Gendarmería Nacional los trasladaron a la frontera con Chile y se notificó a las autoridades migratorias la prohibición de su reingreso permanente.
El ataque a los periodistas del Canal 7 ocurrió el 23 de febrero al mediodía, luego de la derrota de Godoy Cruz en el Malvinas Argentinas. Un equipo de Canal 7, compuesto por una periodista y dos camarógrafos, estaba realizando una cobertura en la plaza Independencia cuando fueron agredidos por un grupo de seguidores de Colo Colo, quienes se mostraron molestos por ser filmados y les robaron un micrófono inalámbrico, según la acusación.
En esta causa estaban detenidos e imputados Mauricio Herbert Molina y los hermanos Ignacio Baltazar y Daniel Alejandro Maulen. Molina es ingeniero climatizador, mientras que los hermanos Maulen son agrimensores, según fuentes judiciales. Están imputados por robo agravado por ser en poblado y en banda, con una pena de 3 a 10 años de cárcel.
La abogada defensora, María Belén Idemi, había presentado un control jurisdiccional en días recientes, solicitando la liberación o, al menos, la prisión domiciliaria para sus clientes. Argumentó que en el momento del ataque y robo había varios seguidores de Colo Colo, lo que dificultaba identificar a los responsables. Además, señaló que al no tener antecedentes, podrían recibir una pena excarcelable si se les aplica el mínimo. Propuso incluso una libertad bajo fianza y permanecer en Mendoza durante el proceso. Sin embargo, el caso se resolvió mediante un juicio abreviado.
Por otro lado, el próximo lunes se llevará a cabo otra audiencia con ocho seguidores de Colo Colo que están detenidos en el penal en relación con una investigación por robo en grupo.
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