La mayoría de los mendocinos que han decidido instalar paneles solares en sus negocios, fábricas, bodegas o residencias, lo han hecho por el ahorro sustancial que implica, pero también para tener una vida energéticamente más respetuosa con el medio ambiente. Y es que las instalaciones fotovoltaicas son una fuente de energía renovable y no contaminante a la hora de producir electricidad y suministrar al hogar. Pero cuando la vida útil de los paneles se va terminando, ¿es posible el reciclaje de los paneles solares?
La empresa mendocina Solhé (https://www.solhe.com.ar), con más de 10 años brindando soluciones en energía solar, lo está haciendo posible en conjunto con Reciclarg (https://reciclarg.com), líder en la gestión de residuos eléctricos y electrónicos. Juntas, serán pioneras en Argentina al reciclar paneles solares y otros componentes utilizados para su instalación.
“Queremos dar utilidad a un material valioso que tiene muchos componentes como silicio, aluminio y vidrio. Aunque por ahora es una prueba piloto, nuestro objetivo es desarrollar un sistema integral de reciclaje para paneles solares en desuso, abordando de forma responsable una problemática ambiental emergente. Elegimos llevarlo a cabo con Reciclarg porque es una firma con muchos años y experiencia en reciclaje y están más que capacitados para tratar de manera correcta la basura electrónica”, asegura Nicolás Giorlando, socio y gerente general de Solhé.
Farid Nallim, co-fundador y CEO de Reciclarg, explica: “A medida que la industria solar crece, también lo hacen sus residuos, y en Reciclarg venimos observando esta tendencia desde hace años. Con este proyecto buscamos evitar que estos equipos terminen en rellenos sanitarios o basurales a cielo abierto, recuperando materiales valiosos y reduciendo el impacto ambiental. En términos económicos, la valorización de componentes como vidrio, metales y silicio permite reintegrarse a la cadena productiva, generando empleo verde y fomentando la economía circular”.
El proceso implica separar mecánicamente las capas que conforman el panel (vidrio, aluminio, celdas fotovoltaicas, entre otros) para la recuperación de materiales. La meta es adaptar estos procesos a escala industrial, siempre priorizando la seguridad ambiental y laboral.
Del reciclaje de paneles solares pueden recuperarse diversos materiales. Entre ellos:
- Vidrio: representa cerca del 70% del panel y puede reutilizarse en nuevas aplicaciones industriales.
- Aluminio: se recupera del marco estructural.
- Silicio: puede ser reutilizado, dependiendo de su grado de pureza.
- Metales como plata, estaño y cobre: presentes en las celdas y conexiones.
Estos materiales se pueden reincorporar a procesos productivos, reduciendo la necesidad de extraer recursos vírgenes y fomentando una economía más sustentable.
Este proyecto comienza como una “iniciativa piloto", con una duración estimada de entre 6 y 12 meses en su fase de desarrollo e implementación inicial. Sin embargo, está concebido como parte de una estrategia a largo plazo, en línea con el compromiso de generar soluciones permanentes para los residuos electrónicos emergentes. La idea es escalar y convertirlo en un modelo replicable para toda la región, y se ejecutará en cinco etapas:
1. Investigación: análisis de tecnologías y métodos de tratamiento.
2. Desarrollo de prototipos: con paneles en desuso provistos por empresas aliadas.
3. Implementación de una planta piloto: dentro de nuestra infraestructura ya existente.
4. Validación técnica y económica: para asegurar viabilidad.
5. Escalamiento progresivo.
Cada paso se acompaña de monitoreo ambiental, cumplimiento normativo y evaluación de impacto.