Apenas 24 horas después de la expulsión de Juliana, uno de los chicos volvió a hablar de más. Se trata de Camila, una de las participantes que ingresó a Gran Hermano hace poco y que sabía, debía guardar absoluto silencio sobre lo que vio y escuchó del juego fuera de la casa.
Te puede interesar
Lamentablemente, ni la severa sanción de su compañera ni la advertencia que le hizo Gran Hermano en el confesionario alcanzaron para que ella tomara conciencia de que no debía hablar más, por lo que la producción tuvo que intervenir.
Una vez que todos los hermanitos estuvieron reunidos en el living, la voz del reality habló: "Una vez más advertí una infracción a la regla que prohíbe a los nuevos participantes hablar del afuera o de cosas referidas a la casa. Camila, en el confesionario te advertí que este tipo de infracciones, eran motivo de sanción. Por lo tanto, esta semana, no podrás hacer uso de tu nominación y, además, te informo que estás nominada".
Todos en la casa quedaron helados frente a esta situación que terminó con Camila llorando. Santiago del Moro sumó: "Si sigue trayendo información del afuera, puede quedar eliminada".