El fútbol ecuatoriano está de luto tras el fallecimiento de Marco Angulo Solórzano, un joven talento de 22 años que perdió la vida luego de un trágico accidente de tránsito ocurrido el pasado 7 de octubre en la Autopista General Rumiñahui, Quito. El mediocampista de Liga de Quito, quien también había representado a la selección nacional, luchó durante 35 días en estado crítico antes de sucumbir a las graves lesiones sufridas.
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El accidente involucró una camioneta Ford Explorer, conducida por la hermana del jugador, que impactó contra una viga destinada a la construcción de un puente peatonal. El choque resultó fatal para dos de los ocupantes: Roberto Cabezas Simisterra, jugador de Independiente Juniors, y Víctor Charcopa Nazareno, de Cuniburo FC. Angulo, gravemente herido, fue trasladado de inmediato a un hospital donde se le diagnosticaron múltiples lesiones, entre ellas fractura de pelvis, edema cerebral y hemorragias internas. A pesar de una intervención quirúrgica para aliviar la presión intracraneal, su recuperación no fue posible.
Trayectoria llena de logros
Formado en las divisiones inferiores de Independiente del Valle, Angulo dejó una huella imborrable en el fútbol local. Fue parte del equipo campeón de la Copa Libertadores Sub-20 y contribuyó al título de la Serie A ecuatoriana en 2021. Su talento le abrió puertas internacionales, fichando por el FC Cincinnati en 2022 y regresando a su país en 2024 para vestir la camiseta de Liga de Quito.
A nivel de selecciones, representó a Ecuador en torneos juveniles y debutó con la selección absoluta en 2022, en un amistoso frente a Irak previo al Mundial de Qatar. Su futuro prometedor fue truncado por esta tragedia, dejando al fútbol ecuatoriano sin una de sus jóvenes figuras.
Mensajes de despedida
El impacto de su partida se sintió en todo el ámbito futbolístico. Liga de Quito expresó su dolor mediante un comunicado, calificando la pérdida de Angulo como "irreparable". La Federación Ecuatoriana de Fútbol también dedicó un emotivo mensaje en redes sociales, recordando su talento, compromiso y calidad humana.
Marco Angulo deja un legado que trasciende las canchas. Sus compañeros, entrenadores y aficionados lo recordarán como un jugador con un futuro brillante y un compañero excepcional. Su muerte marca un momento de reflexión para el deporte ecuatoriano y una profunda tristeza para quienes compartieron su camino.