Una pericia determinó que en el cuerpo y en la ropa del neurólogo que murió en el incendio del departamento de Felipe Pettinato había restos de una sustancia acelerante. Así lo confirmaron fuentes policiales, que dijeron que si bien se detectó una sustancia del tipo acelerante en el cuerpo de Melchor Rodrigo. No saben si fue kerosene, nafta o alcohol.
La nueva pericia fue realizada en un laboratorio de la Policía Federal Argentina que prestó colaboración a la fiscalía y el resultado se obtuvo en las últimas horas.
En cuanto al incendio que terminó con la muerte del neurólogo, trascendió que los resultados preliminares de las pericias determinaron que el fuego se habría originado con un “elemento ígneo capaz de generar una llama libre”, como podría ser “un encendedor, un fósforo o papel previamente acondicionado para ser encendido”. La autopsia de Rodrigo reveló que murió por "quemaduras críticas, congestión, edema y hemorragia pulmonar", pero falta aún que se realicen más pericias para determinar cómo se desencadenó su deceso.
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Los resultados preliminares de estas pericias fueron entregados al fiscal Martín Mainardi, de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Nº 25, que lleva adelante la investigación. Las pruebas realizadas por efectivos del cuerpo de Bomberos de la Ciudad, en conjunto a los Bomberos de la Federal, ya habían señalado que el fuego podría haberse originado por un “elemento ígneo capaz de generar una llama libre”, algo así como un encendedor, papeles en llamas o fósforos. Por eso no es posible descartar que, combinado con el líquido acelerante en el cuerpo de Rodrigo, se haya agudizado el desarrollo de las llamas.
Todo comenzó el lunes 16 de mayo, alrededor de las 23.40, cuando -en circunstancias que todavía se desconocen- el departamento empezó a arder. Tras el hecho, Rodrigo falleció, otras dos personas resultaron heridas y Pettinato sufrió una descompensación que derivó en su internación. El departamento quedó destruido. Las llamas empezaron en el living comedor y se extendieron a la cocina, el baño y hasta el balcón.