Es la historia de un personaje andrógino, niño, niña, joven, porque no se sabe si es hombre o mujer, que llega este mundo al que tendrá que hacer frente desde pequeño, con unos padres que no harán nada por modificar su vida o porque no tienen posibilidades para que eso cambie. Pluma dice que la vida es una tempestad y para sobrevivir debe andar flotando como una pluma entre personajes que se ira encontrando en el camino y le enseñaran aspectos de la vida. Así conocerá la frustración, el amor, la mentira.
La obra es elegida por el director por la construcción de sus escenas, por la potencia del texto, y que no por ser coloquial en su dramaturgia, deja de tener poesía. Esta obra es elegida por Guillermo Troncos por la temática que aborda, las infancias, la juventud, la vejez, la vida.
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La idea de realizar esta obra surge cuando Guillermo Troncoso conoce el texto hace muchos años y le ronda la idea de empalmar a Pluma, el personaje, con un títere. Así luego nos encontramos con tres de los personajes llamados Pluma, personificados en dos actores y un títere. Estos personajes se irán desdoblando en algunas escenas y en otras se unificarán. De esta forma es como el director empezó a tener imágenes de las escenas de esta puesta, a crearlas, pensar en su música y sobre todo le fascinó la idea de tomar el riesgo total de investigar y encontrar un recurso para poder contar esta historia.
La temática es elegida por el director por las experiencias que le ha dado el teatro en todas sus facetas, desde creador, productor y director, y de todas ellas se fue nutriendo en su quehacer como artista. Algunas de ellas como por ejemplo actuar en cárceles, cárceles de menores, y la misma calle con todas las imágenes que entrega día a día. Guillermo Troncoso creyó conveniente hablar de estas problemáticas en una obra, y para hacerlo nada mejor que la poesía de Arístides Vargas que ha sabido captar tan bellamente lo que sucede en nuestra sociedad en todos sus aspectos.
También al director le interesa la comicidad y esta obra también tiene esos momentos tan absurdos como situaciones que a veces se nos presentan en la vida misma. Se buscó contarlas con ese toque característico de lo cómico de lo diario que muchas veces formamos parte y no nos damos cuenta.
Acerca del director: Guillermo Troncoso
Actor, director, docente, mimo, titiritero mendocino. Posee una larga trayectoria actoral con más de 50 obras en su haber como actor. Ha dirigido entre, teatro infantil, adultos, café- concert, vendimias nacionales y departamentales, en más de veinticinco espectáculos. Ha dirigido obras en la Ciudad de Rosario, Rio Negro, Neuquén, Mendoza. Ha obtenido más de trece premios como mejor actor y director en distintos festivales nacionales e internacionales. Ha realizado giras teatrales por las provincias de todo el país y en países como Ecuador, Brasil, Uruguay, Chile.
Acerca del autor: Arístides Vargas
Dramaturgo, director y actor argentino. Doctor Honoris Causa, Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza (Argentina). Referente del teatro latinoamericano. En 1976 se exilió en Ecuador y fundó la compañía Malayerba. Ganador de premios teatrales en Buenos Aires, Londres, París, Los Ángeles y La Habana. Escribió más de 30 obras dramáticas, entre ellas “La razón blindada”, “La edad de la ciruela”, “Nuestra Señora de las Nubes” y “Jardín de pulpos”. Muchos de sus textos fueron traducidos al inglés, japonés, francés, portugués, italiano y alemán. Sus historias giran en torno a temas relacionados con la memoria, el desarraigo, la marginalidad, el exilio y la violencia.
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Ficha Técnica: “Pluma y la Tempestad” de Arístides Vargas.
Dirección general y puesta en escena: Guillermo Troncoso.
Asistencia de dirección: Eleonora Acosta.
Diseño escenográfico: Rodolfo Carmona.
Elenco:
Antón Deputat
Mauro Medero
Débora Candito
Camilo Barrozo
Mariela Svachca
Cristian Bustos
Mirta Rodríguez
Alejandro Manzano
Diseño y realización de títere: Rosana López.
Realización de vestuario de Pluma: Susana Rivarola.
Fotografía: Damián Soloducha
Asistencia técnica: Franco Crosta