La fuerte caída de granizo del miércoles hizo mucho daño en varias zonas productivas de Mendoza, donde varios productores perdieron toda la cosecha y manifestaron dieron a conocer su dolor y piden que la Vendimia no se festeje.
“Nada que festejar”, expresaron los pequeños productores de la provincia que fueron afectados por la piedra en la provincia. Muchos de ellos sin contar con los recursos que tienen las grandes empresas del vino, perdieron más del 80% de su producción, trabajo de todo un año.
Con la intención de hacer viral la situación los productores publicaron fotos y videos de cómo el granizo daño su cosecha. Junto a estas imágenes los productores dieron testimonio de lo que les ocurrió y pidieron que no se festeje la Vendimia después.
“Cuando las prioridades cambien, cuando se entienda que Mendoza es productora, cuando se gaste y se invierta en lo que se debe, cuando se deje de mirar a la hormiga y se les pase el elefante”, comenzó su publicación la mendocina Verónica Moreno.
“Recién ahí van a darse cuenta que la piedra de hoy no solo se llevó la producción de este año y del que viene, sino que se llevó el trabajo y el sacrificio de familias enteras no que atienden cómo se puede festejar Vendimia a costa del sufrimiento. Cuando todo esto pase, desastres como los de hoy van a doler menos #Nada que festejar”, expuso la mendocina en su perfil personal junto a fotos de los daños que causó el granizo en su tierra.
Familias enteras se encontraron devastadas por las perdidas, dependiendo de la cosecha para sus ingresos. Algunos contabilizaron daños hasta el 99% y los que han tenido suerte, solamente el 40%.
Las perdidas de una finca familiar
Una joven maipucina pudo brindar detalles a Vía Mendoza sobre las perdidas que sufrió la finca de su familia, que maneja con su papa. En su terreno tiene vid, olivo y durazno.
“Somos pequeños productores de Maipú. Tenemos simplemente 3 hectáreas. Es la cuarta generación familiar que la tiene”, expresó Estefanía.
Ella contó que alcanzaron a levantar la fruta peluda hace unos días atrás. La aceituna la iban a levantar el lunes. La vid planificaban cosecharla en unos 15 días.
“La aceituna es lo que más hemos perdido. Más o menos un 40%. Definitivamente no lo vamos a poder cosechar para venderla en fresco sino que será para aceite”, explicó la joven.
Según Estefanía, han tenido suerte a comparación a otros productores de la zona, porque aproximadamente un 60% ha quedado en planta. Pero que haya quedado en planta no significa que se pueda vender en fresco.
“A una aceituna la han peñacado como unas seis veces. Osea que 6 piedras distintas la han golpeado en diferentes ángulos. Esa aceituna no se puede vender para fresco, solamente sirve para aceite”, explicó Estefanía.
La devastación en la voz de la maipucina es evidente. Ella indicó que iba a ser un buen año para la aceituna, habían conseguido un buen precio por el kilo.
Ahora que deben vender su oliva para aceite, solamente podrán tener un 30% de lo que iban a ganar, ya que cada kilo en estas condiciones se paga a la mitad.
“Es como que se va parte de uno. Aveces la gente no lo entiende pero pensar que en 5 días uno iba a empezar a cosechar el trabajo de todo el año, es un desanimo total. Lo escuché decir a mi papá no sé para que uno se esfuerza tanto si todo se va tan rápido”, expresó.
Pero entre la tristeza, agradecen que sus perdidas no fueron totales. Sus vecinos, quienes se dedican a la vid, perdieron toda su uva. La tenían en parral y el granizo destrozó todo. Lo poco que les quedó en la planta se echará a perder, ya que en dos días se pudrirá.
“Increíble que no hubo ni un avión para combatir la tormenta. Creo que el estado provincial no pone nada, no existen esos aviones”, concluyó Estefanía.
Esta es tan solo la realidad de una familia productora de Maipú, pero fueron miles lo damnificados directamente, sin contar aquellos que sufren las consecuencias indirectamente.