Cristina Sonego, encargada del trabajo, señaló que las esculturas sufrieron algunos daños irreversibles.
Luego de haber sido vandalizadas a comienzo de semana, las esculturas de Mafalda y sus amigos fueron restauradas. La encargada del trabajo fue Cristina Sonego, quien ya había restaurado la obra para su puesta en valor.
Al respecto la especialista explicó: “Los hechos de vandalismo ocasionaron daños. La figura de Mafalda fue la más agredida, en el rostro, con grafitis hechos con corrector de tinta permanente. El daño fue mayor cuando los vándalos quisieron limpiarla con el disolvente, donde produjeron chorreaduras y, al frotar, un aspecto de abrasión en la cara de Mafalda. Esto fue muy difícil de tratar, ya que se llevó parte pigmentaria de la obra. Las otras dos figuras fueron vandalizadas con grafitis, pero no de tanta intensidad. Además, Susanita tenía papel con adhesivo en el brazo”.
Respecto al trabajo realizado en estos días, Sonego detalló: “Se realizó un proceso de limpieza y restauración, porque debió intervenirse ya el rostro de Mafalda. Consistió en una limpieza y retirada de la tinta del marcador, que era tinta permanente, y de todas las chorreaduras que había provocado el disolvente, con resto de tinta en la pierna, cuello, en la camisa y en la parte posterior del vestido de la figura”.
Luego agregó: “Posteriormente, al evaporar el disolvente utilizado para retirar el material, se realizó una base de reintegración cromática neutra en toda la cara de Mafalda, para darle una integridad porque de lo contrario era imposible que quedara uniforme. Ahora ha quedado bastante parejo y se va a dejar 24 horas para que seque y mañana se le colocará una protección. Se trata es una emulsión acrílica de base acuosa reversible para su reversibilidad con disolventes orgánicos. De esta forma, con el agua de lluvia no se va a salir esa protección y va a pervivir en el tiempo un poco más”.
Respecto a los daños en las esculturas de Susanita y Manolito, contó: “Las otras dos figuras no tuvieron tantos daños de gravedad. Solamente Susanita, en el cabello, donde sí se produjo un desgaste intenso del color y quedaron dos manchas mínimas del marcador, que fueron imposibles de retirar. No se le realizó reintegración cromática y se colocó directamente protección”.