“Hay que poner a trabajar a los ñoquis políticos de IMPSA para llegar a la eficiencia total del agua”, dijo Vadillo
El diputado provincial Mario Vadillo, candidato al Congreso de la Nación por el Partido Verde, presentó una propuesta ambiental que revoluciona el actual sistema de uso del agua.
Es un proyecto de ley para que IMPSA desarrolle tecnologías, productos y servicios que logren una eficiencia total del recurso hídrico en Mendoza. Para esto se redireccionará el dinero destinado a Portezuelo del Viento.
Nunca en la historia se registró un periodo de sequía tan prolongado como el actual. La escasez de agua lleva más de 10 años y los pronósticos no son alentadores. El panorama es irreversible y la única forma de que la vida continúe tal como la conocemos en la actualidad es una urgente adecuación de Mendoza al cambio climático. Es por eso que el diputado provincial y candidato al Congreso de la Nación por el Partido Verde, Mario Vadillo, presentó un proyecto de Ley en el que desarrolla un plan de eficiencia total del agua en Mendoza inspirado en el que usa Israel. Esto permitiría triplicar y hasta cuadriplicar el oasis productivo provincial.
Vadillo propone que los 1.023.000.000 de dólares destinados a Portezuelo del Viento sean invertidos en desarrollo de tecnologías, productos y servicios para alcanzar la eficiencia hídrica. IMPSA estaría a la cabeza del proyecto y esto generaría dos soluciones: por un lado la adecuación de la provincia al cambio climático; y por otro, el reposicionamiento de la empresa provincial.
El correcto funcionamiento de IMPSA significará el fin a un botín político y la convertirá en un engranaje productivo del cual se desprenderá empleo genuino, tanto para jóvenes profesionales como para trabajadores calificados, y la activación de empresas asociadas. Además, exportará sus tecnologías, productos y servicios, lo que la convertirá en líder en la región, el país y Latinoamérica respecto a la adaptación al cambio climático.
“Si se construye Portezuelo va a ser plata malgastada porque el caudal del Río Grande no supera el 40% por la sequía severa que padece. Necesitamos hacer una inversión que realmente valga la pena”, dijo el funcionario.
Según Irrigación, para mitigar el impacto del cambio climático, la provincia necesita alrededor de 230.000.000 dólares. Aysam, por su parte, solicita una inversión de unos 1.000.000.000 de dólares. “Ni siquiera con mil millones de dólares nos alcanza para solucionar los problemas hídricos, pero es el inicio de la solución”, agregó Vadillo.
El Plan de Eficiencia del agua propuesto por Vadillo tiene como objetivo que toda el agua potabilizada llegue a los usuarios. Hoy, el 70% de ese caudal se pierde porque las redes tienen más de cien años, están dañadas y la mitad ya cumplió su vida útil.
El proyecto de Ley propone la implementación de nuevas tecnologías de control de eficiencia, la colocación de macro y micro medidores y el reemplazo de infraestructura. De esta manera se bajaría a la mitad los gastos de potabilización, la tarifa al usuario y se brindaría un servicio sin interrupciones, que está capacitado para ampliar cobertura a los nuevos emprendimientos inmobiliarios.
El proyecto hace especial hincapié en elevar la eficiencia de riego agrícola y que pase 15 a 20% actuales hasta un 70-80%. Para esto se implementará la tecnificación de procesos de conducción, distribución y riego intrafincas, además de la fabricación de productos para la presurización del riego e inversión en infraestructura hídrica.
Otro de los puntos a resaltar es la implementación de tecnología, productos y servicios para el tratamiento de efluentes industriales y cloacales para la reutilización de aguas residuales disminuyendo el impacto ambiental de las mismas.
La empresa estatal trabajará en cooperación y coordinación con las PYMEs, empresas locales a fines que puedan hacer los aportes necesarios y universidades provinciales.
“Esto va a triplicar o cuadriplicar los oasis productivos que tenemos en la provincia, pero también lograrías la recuperación de los caudales mínimos ecológicos para nuestros humedales”, agregó Vadillo.
IMPSA estatal, destino de eficiencia total
IMPSA es la empresa indicada para el proyecto porque se sostiene con fondos del Gobierno Provincial y Nacional, además de tener experiencia en desarrollo tecnológico hidroeléctrico y eólico.
Tiene las capacidades, habilidades y el recurso humano necesario no solo para desarrollar esta tecnología sino también para exportarlos a provincias y países vecinos.
Si Israel pudo, Mendoza también
Israel logró llevar a cabo la eficiencia del agua y pasó de ser un desierto a un oasis productivo. Se convirtió en un líder mundial en tecnología, productos y servicios para la eficiencia hídrica y Mendoza aspira a lo mismo.
En Israel, el 90% por ciento de los efluentes se reciclan, el 75% de los suelos agrícolas tiene tecnología para irrigar y el 80% del agua que se consume proviene de la desalinización.
Vadillo cerró: “Nosotros como tercera fuerza no queremos que la estatización de IMPSA sea un aguantadero de ñoquis políticos. Queremos que lo invertido en su compra valga la pena, que realmente haya sido para salvar a nuestra mejor y más prestigiosa empresa provincial. Una IMPSA sin ñoquis políticos, al servicio de los mendocinos, solucionando los problemas del cambio climático de la provincia y exportando tecnologías, productos y servicios es posible, solo falta que el pueblo apoye al Partido Verde”.