Ante el impacto que tuvo la pandemia de coronavirus en la educación, el ministro Nicolás Trotta aseguró que las clases terminarán a fin de año, con vacaciones de verano incluidas, tal como estaba previsto antes de la pandemia y que no se va a promocionar de año.
El funcionario además advirtió que la reorganización del contenido pedagógico de las escuelas podría llevar de dos a tres años.
En este sentido, puntualizó: “La reorganización implica que el año próximo sea algo extraordinario. Una niña que pase a quinto grado, antes de poder abordar los contendidos de quinto grado, vamos a tener que garantizar los aprendizajes de cuarto. Y esto va a implicar uno, dos o tres años de reorganización para no renunciar ni a los aprendizajes ni a la calidad educativa. Esto impacta de manera fuerte en el sistema educativo argentino, pero también en todo el mundo”.
Sobre el fin del ciclo escolar del 2020, Trotta confirmó que será tal como estaba estipulado antes de que comenzara la pandemia del coronavirus. “Va a haber vacaciones, la cursada termina a fin de año”, sostuvo en el programa “A confesión de parte” por FM Milenium.
Sobre cómo será el método de evaluación, Trotta explicó: “Estamos trabajando la estrategia de promoción. No se va a promocionar de año. Tenemos que poder establecer una pauta de reorganización de lo que tiene que ser la propuesta pedagógica del año, donde primero vamos a tener que garantizar los contenidos y reorganizar los del año anterior”, insistió.
Además, dijo que situación generada por la pandemia “impacta de manera profunda en los aprendizajes”, lo que implica un enorme desafío “porque las aulas van a ser heterogéneas y más desiguales”.
“Tenemos por delante un proceso de reorganización pedagógica para garantizar los aprendizajes. Se profundiza la realidad de desigualdades. No es lo mismo un hogar con cuatro hijos que otro con uno solo, para poder acompañarlos en la tarea en el hogar. Hoy está el que tiene una sola computadora para compartir, o no tiene ninguna y se realiza todo el proceso pedagógico con los docentes usando WhatsApp. Es la regla en un país tan desigual como la Argentina”, aseguró el ministro.
Detalló que, a partir de la evaluación de los aprendizajes que se dieron en el hogar, en el momento de regresar a la presencialidad, habrá que “poner en valor el esfuerzo de chicos y maestros, para ver cómo han sido sus aprendizajes”.
“En el 2022 vamos a tener que hacer algo parecido con los contenidos que no logremos transitar de ese grado, conjuntamente con el otro. ¿Cuánto tiempo nos va a llevar? Serán dos o tres años. Los chicos que van terminando nivel, tanto secundario como primario, vamos a tener que garantizar los módulos específicos para garantizar los aprendizajes. Lo que no podemos renunciar es que cada chico que termina el nivel tenga todos los elementos para proyectarse al nivel siguiente”, reiteró Trotta.
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También dijo que todos los días ve “el compromiso de las maestras y maestros, y los chicos, y eso hay que ponerlo en valor”. “Hay que sostenerlo. La construcción del capital de conocimiento que se está llevando, dispar, distinto, desigual, lo tenemos que sostener. En el marco que sirva para contener la angustia que tienen los chicos. Lo planteé desde el primer momento: más importante que aprender, cuando es posible, es tratar de ayudar a que los que los chicos procesen este momento tan excepcional y único que están transitando”, disparó.
Trotta dijo, además, que esta pandemia también “tiene un impacto subjetivo en los chicos y chicas que no pueden ir a la escuela; un impacto psicosocial que implica poner en suspenso toda la realidad de sociabilización, que es tan trascendente en distintos momentos de la vida escolar”.
Asimismo, adelantó que el ciclo lectivo terminará en el calendario que estaba pautado desde principios de año y que habrá vacaciones de verano. “El desafío de reorganización de propuesta pedagógica para garantizar los aprendizajes es muy complejo. No lo vamos a resolver con una o dos semanas más de clases”, definió.
Respecto de la vuelta al trabajo de los adultos antes de las clases de los niños, dijo que para ello está dispuesto “la ausencia justificada para los adultos del hogar que se queden con los chicos”. “Planteamos que el regreso no es obligatorio. Lo que es obligatorio es el derecho a la educación. Como Estado tenemos garantizar todos los caminos porque no es obligatoria la presencialidad en el marco de una pandemia. Queremos dejar ese debate de lado”, concluyó. (Clarín)