El libro de memorias de John Bolton, exasesor de Seguridad Nacional de Donald Trump, se está convirtiendo rápidamente en el más esperado del año. A pesar de que todavía no está disponible, el libro titulado “La habitación donde ocurrió” ya es el número uno en ventas en Amazon. Y aunque su salida al mercado todavía está en veremos luego de que el Departamento de Justicia interpusiera una demanda para detener su venta, los extractos que han publicado los medios ya causaron una tormenta en la Casa Blanca.
Ayer se supo que, de acuerdo con Bolton, Trump pidió apoyo al presidente chino Xi Jinping durante una cena. El mandatario estadounidense le habría solicitado a Xi que incrementara la compra de productos agrícolas a los granjeros estadounidenses para mejorar sus posibilidades rumbo a reelección del próximo mes de noviembre.
Trump demandó a su ex asesor de Seguridad para impedir que revele secretos del caso Ucrania.
El Washington Post también detalló que durante una reunión del G-20 en junio del año pasado, Xi se quejó de las críticas que su régimen estaba recibiendo en la prensa estadounidense, sin embargo, “Trump de inmediato asumió que Xi se refería a los demócratas”, escribió Bolton. “Trump dijo con aprobación que había mucha hostilidad entre los demócratas”. Fue entonces que Trump, “sorprendentemente”, empezó a hablar de la próxima elección, “haciendo alusión a la capacidad económica de China para afectar las campañas, pidiéndole a Xi que le asegurara el triunfo”, dijo el asesor.
El presidente habló de la importancia de los granjeros y pidió que China incrementará la compra de soya y trigo. “Escribiría las palabras exactas de Trump”, dice Bolton, “pero el proceso de revisión de prepublicación del gobierno ha decidido en contra de eso”.
Sobre el escándalo Ucrania, Bolton menciona que, durante una reunión que sostuvo con Trump en agosto pasado, el presidente fue muy claro sobre lo que quería obtener: “Dijo que no estaba a favor de enviarles nada [de apoyo en equipo militar] hasta que todo el material relacionado con Clinton y la investigación Rusia fuera enviado”. Este escándalo terminó con el impeachment de Trump en la Cámara Baja y su posterior exoneración durante el juicio en el Senado.
Pero conociendo a Trump y su vanidad, más allá de las acusaciones de comportamiento ilegal, los detalles que más le molestarán son aquellos que tienen que ver con su ignorancia e incompetencia. Bolton pintó un retrato nada favorecedor de su exjefe.
Tillerson y Mattis estaban a cargo de vigilar a Trump y evitar un desastre global.
Narra, por ejemplo, que el presidente creía que Finlandia formaba parte de Rusia; que desconocía que el Reino Unido era una potencia nuclear; y que tenía la intención de enviarle al líder norcoreano Kim Jong Un un ejemplar autografiado de la autobiografía de Elton John, Rocketman, con quien Kim comparte el apodo que Trump le puso.
De acuerdo con extractos publicados por el New York Times, Bolton menciona el “eje de los adultos”, formado por el entonces secretario de Estado y exCEO de ExxonMobil Rex Tillerson, y el secretario de la Defensa James Mattis, quien recientemente publicó una carta condenando las acciones de Trump y pidiendo su salida de la Casa Blanca. El exasesor de Seguridad asegura en sus memorias que el eje de los adultos tenía la responsabilidad de vigilar las acciones de Trump en el exterior y evitar una catástrofe diplomática.
Las revelaciones del libro han sido tan explosivas que el propio autor no ha estado exento de críticas. Los líderes demócratas condenaron a Bolton por negarse a testificar ante el Comité de la Asamblea que analizaba el impeachment del presidente meses atrás. “[Bolton] podrá ser un autor, pero no es un patriota”, dijo el congresista Adam Schiff, presidente del comité de inteligencia de la Asamblea y el demócrata a cago de presidir la investigación sobre las acciones de Trump en el escándalo Ucrania.
“Al staff de Bolton se le pidió testificar ante la Asamblea sobre los abusos de Trump, y lo hicieron. Ellos tenían mucho que perder y mostraron verdadera valentía”, dijo Schiff en su cuenta de Twitter. “Cuando se lo pedimos a Bolton, se negó, y dijo que demandaría si era citado. Mejor, lo guardó para un libro. Bolton podrá ser un autor, pero no es un patriota”, dijo el congresista.
A pesar de negarse a testificar contra su exjefe, Bolton dice en su libro que la Asamblea debió investigar otras ofensas de Trump, quien -dijo-se comportó como si “la obstrucción de la justicia fuera una forma de vida, algo que nosotros no podíamos aceptar.
“Si los abogados demócratas del impeachment no hubiesen estado tan obsesionados con el desastre de Ucrania en 2019, si se hubieran tomado el tiempo de investigar de manera sistemática el comportamiento de Trump en toda su política exterior, el impeachment habría salido diferente”, aseguró.