En las últimas horas, ante la amenaza de Pablo Arancibia, imputado por el femicidio de que iba a quitarse la vida, fue trasladado con fuerte custodia al hospital psiquiátrico El Sauce. Comparte espacio con otro asesino, Nicolás Gil Pereg.
Como medida preventiva ante la posibilidad de un suicidio, Pablo Arancibia imputado por el femicidio de Florencia Romano que provocó una gran conmoción en la provincia, fue llevado en las últimas horas al hospital El Sauce en Guaymallén.
Es que en medio de su llegada al penal de Boulogne Sur Mer, donde permanecía aislado ante la posibilidad de agresiones por parte de los otros internos, dijo varias veces que se iba a suicidar. Se encontraba en el sector de admisión del viejo penal mendocino, con protección por las reiteradas amenazas de los internos que indicaban que lo esperaban para hacer justicia por mano propia.
Ante el estado en que se encontraba el imputado le dieron asistencia psicólogos que recomendaron su traslado al neuropsiquiátrico. Una vez revisado por personal del Cuerpo Médico Forense, decidieron finalmente llevarlo a ese nosocomio. Allí comparte espacio con el ciudadno de origen israelí Nicolás Gil Pereg, que está acusado del asesinato de su madre y de su tía.