Marcos Galperin finalmente le está ganando de “local” a Falabella, que acaba de cerrar tres locales en las provincias de San Juan, Córdoba y Mendoza en su plan de achique destinado a lograr “mayor sustentabilidad” de su negocio.
Mientras tanto, por la vereda del sol sigue caminando a paso firme Mercado Libre, con el viento de cola de la pandemia que pega de lleno tanto en el ecommerce como en los pagos digitales.
De hecho, es una de las acciones favoritas de los brokers de Wall Street: pasó de u$s488 a los u$s1.900 actuales, que llevaron su valor bursátil hasta los u$s94.000 millones.
Así, se ubica a la par de otros gigantes como Baidu, conocido como el “Google chino”; o Snap, la red social para adolescentes que inventó las “Stories”. Y está al tope entre las “multilatinas”, superando a la minera Vale (u$s90.000 millones) y Petrobras (u$s69.000 millones).
Superar a Falabella fue una deuda pendiente del empresario argentino más importante de la historia. En el libro “Los Reyes de la Argentina”, Galperin ya había marcado al gigante trasandino como el rival a vencer, que en ese momento valía u$s30.000 en la bolsa de Santiago. Hoy, su capitalización es u$s9.200 millones.
Los principales jugadores del retail chileno apostaron a ejecutivos argentinos, dada su fama como “emergentólogos” de empresas en problemas financieros, para tratar de hacer frente a Mercado Libre.
La primera gran jugada de Bottazzini fue el “golpe por golpe“. Así como Mercado Libre le “comía” share por medio del negocio online, Falabella hizo lo propio: adquirió a Linio, un ecommerce regional en ascenso, por la nada despreciable suma de u$s1.380 millones.
Galperin no arrugó y también empezó a jugar en el terreno del holding chileno, pero en versión digital. Ese mismo año, comenzó el pasaje de Mercado Pago de una simple pasarela de cobros de Mercado Libre a un fintech con servicios equiparables al de un entidad financiera –como Banco Falabella, que funciona en Chile– pero de presencia regional.
El golpe de gracia ocurrió en 2020. Primero, el unicornio apuró su SuperMercado Libre, tal como adelantara iProUP. Así, su segmento con stock propio y precios convenientes de artículos de alacena en su centro logístico de La Matanza permitió competir de igual a igual con las cadenas de supermercados.
A ver el éxito de este vertical, no dudó en acelerar la creación de su propio “Falabella online“, con la venta directa de artículos de bazar, electrónica y otros productos.
Es decir, conformó una verdadera tienda “departamental”, un concepto muy arraigado en Chile (quienes recorran la avenida Alameda en Santiago verán en cada cuadra una sucursal de Falabella, París o Ripley) y que en Argentina sólo tuvo el antecedente de la icónica Harrold’s Gath y Chaves.
Así, aprovechó que la chilena estaba “en retirada” en suelo albiceleste, en gran parte debido a las trabas a las importaciones y al acceso al mercado de cambio, sumada a la crisis internacional de este tipo de tiendas.
Tampoco hay demasiados interesados en quedarse con la operación argentina, aunque el fondo de private equity Habitar, liderado por el exautopartista Hugo Pascarelli lanzó una oferta. En cambio, Sodimac, otra de las firmas del grupo, recibió propuestas del fondo Invelat (dueños de Havanna), la cadena de construcción Bercomat y José Manuel Ortiz Masllorens, uno de los socios de Cono Sur Investments.
Según información provista a iProUP, el proyecto no era nuevo: la compañía conformó su departamento de ventas con la contratación de ejecutivos de “compras”, división propia de las cadenas minoristas que se encarga de seleccionar los proveedores. Para nutrir ese área, la empresa más valiosa de la región “fue de caza” por profesionales de grandes empresas de consumo masivo.
“Venimos avanzando en modelos de trabajo con los vendedores para seguir brindando la mejor experiencia de compra a los usuarios”, señalaron desde el unicornio a iProUP.
Y completan: “Entre ellos, se destaca la oferta de productos exclusivos que las marcas destinan para vender solo en Mercado Libre y la creación de etiquetas nuevas para otras categorías que actualmente no tienen una oferta competitiva en el marketplace”.Ipropup