Este compromiso público-privado permitió cubrir cerca de 90.000 hectáreas durante 2020 en la provincia de Mendoza.
De esta forma el Poder Ejecutivo nacional dispondrá la asignación de una partida presupuestaria especial para cumplir con lo que estipula el Programa Nacional de Prevención y Erradicación de Lobesia Botrana.
Luego de la brusca reducción de aportes entre 2016 y 2019 resulta fundamental continuar con el combate para evitar rebrotes. En este sentido, Fernández Sagasti analizó: “Entendemos que este tipo de decisiones apunta a priorizar las economías regionales, y en el caso de nuestra provincia la posibilidad de erradicar en el corto plazo la polilla de la vid”.
En la Argentina 17.000 productores cultivan 220.000 hectáreas de vid, que generan 385.000 puestos de trabajo directos e indirectos. “Son muchos argentinos y argentinas del interior profundo del país que viven de este sector y que se pueden ver afectados por las consecuencias de la plaga; por lo que resulta indispensable dar continuidad a las acciones realizadas” apuntó la vicejefa del Bloque del Frente de Todos en los argumentos del proyecto.