El Gobierno, a través de la Secretaría de Industria y Comercio, anunció una significativa simplificación en los trámites necesarios para que fabricantes e importadores de electrodomésticos puedan comercializar sus productos. La medida busca estimular la competencia, ampliar la oferta y reducir los precios al consumidor.
Un cambio en la burocracia
Hasta ahora, las empresas enfrentaban un proceso complejo: realizar ensayos locales para medir la eficiencia energética, obtener certificaciones con auditorías anuales (incluso en fábricas extranjeras) y tramitar permisos en la Secretaría de Industria y Comercio, que luego debían ser presentados en Aduana.
Con la publicación de una Resolución en el Boletín Oficial, el Ejecutivo elimina estas exigencias. En su lugar, las empresas deberán presentar únicamente una declaración jurada asegurando el cumplimiento de las normativas vigentes.
“Este cambio reducirá los costos burocráticos de más de 150 empresas que fabrican o importan productos, agilizando los tiempos y generando una mayor disponibilidad en el mercado”, explicó Pablo Lavigne, titular de la Secretaría.
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Impacto en el mercado
La medida beneficia a una amplia gama de productos: aires acondicionados, heladeras, lavarropas, termotanques, televisores, microondas, lámparas, lavavajillas, electrobombas, motores y hornos eléctricos. Al eliminar trabas administrativas, se espera que el mercado experimente un aumento de la competencia y una consecuente baja de precios.
Desde el sector, fabricantes e importadores han recibido la iniciativa con optimismo. “La burocracia era una de las principales barreras para operar. Esta decisión no solo nos permite ser más ágiles, sino que beneficia directamente al consumidor final con mejores precios y opciones”, comentó un representante del rubro.
Hacia una economía más dinámica
El Ejecutivo enmarca esta desregulación dentro de una estrategia más amplia de promoción económica, reduciendo costos innecesarios y facilitando el comercio interno. "Este es un paso más para impulsar la producción y el consumo responsable en Argentina", concluyó Lavigne.
El nuevo reglamento, que entrará en vigencia tras la publicación en el Boletín Oficial, marca un avance hacia un modelo comercial más accesible, competitivo y orientado al bienestar del consumidor.