El Club Atlético Piraña, un nombre curioso inspirado en el apodo del famoso goleador Jaime Sarlanga, ha tenido una existencia llena de altibajos desde su fundación. Afiliado a la AFA en 1961, el club de Parque Patricios disfrutó del talento de Héctor “Chirola” Yazalde, cuya venta a Independiente por 1.800.000 pesos permitió la construcción de una piscina, símbolo de prosperidad que hoy está cubierta debido a los costos prohibitivos de su mantenimiento.
En 1979, el club inspirado en el abuelo del empresario Juan Pablo Sarlanga, gritó campeón en un desempate contra J.J. Urquiza, partido presenciado por Diego Maradona en la cancha de Argentinos Juniors. Esa misma temporada, compartieron la Primera C con Lanús. No obstante, dos años después, el club terminó en el último puesto de la D, quedó desafiliado y nunca regresó. A mediados de los noventa, el club cerró sus puertas y el terreno fue usurpado por una banda narco, hasta que el 14 de enero de 2014, el juez Sergio Torres, del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nº 12, devolvió el club a sus socios.
Oscar Bianco y Ernesto Rostanzo, junto a sus padres, fueron fundamentales en esta resurrección. Bianco, hijo de uno de los socios fundadores y figura del equipo campeón que ascendió a la Primera C en 1978, hoy preside el club que revivió en 2014. En una entrevista al diario La Nación, Bianco aseguró que "Piraña es mi vida, yo nací acá adentro". Rostanzo, de 40 años, nunca vio al club afiliado a la AFA, pero su padre, uno de los pioneros de la refundación, le inculcó el amor por Piraña. "Mi papá se casó acá", recuerda.
Ambos lideran el renacimiento del club, siempre situado en Elía y Famatina, y que ha superado numerosas dificultades desde su fundación el 12 de septiembre de 1942. Según Bianco, "fue un acto de locura. Nos entregaron un lugar que era Kosovo y entramos a Kosovo". Además, resaltó la difícil tarea de reconstrucción.
La publicidad que hizo revivir al club
La publicidad de una compañía de telefonía celular en 2018 rescató y popularizó la historia de Piraña, revitalizando el club. Bianco aseguró en su momento que provocó que muchos se volvieran a acercar al club, algunos ni sabían que estábamos acá.
Actualmente, el club cuenta con entre 400 y 500 socios, aunque en su apogeo llegó a tener más de 5000. Ofrece diversas actividades, alquila sus canchas de fútbol 11 y futsal, organiza eventos comunitarios y está construyendo vestuarios para los usuarios de su cancha principal. Rostanzo también aclaró que todas las obras se hacen con dinero del club.
Para 2018, tienen una meta ambiciosa: instalar césped sintético en su cancha principal. "Es nuestra vaca lechera, más que los socios", admitió Bianco. Además, aseguró que cuando llueve en invierno, no pueden usar la cancha durante un mes, un mes sin poder alquilarla. Por eso, desde ese entonces se dedicaron a hacer la cancha de césped sintético. El campo además tiene el objetivo de que sea usado por todos los juveniles y para que Piraña pueda volver a jugar en la D.
La afiliación a la AFA parece lejana, ya que actualmente deben alquilar una cancha para jugar de local, su infraestructura no cumple con las medidas oficiales, y carecen de plantel y recursos suficientes. Sin embargo, mantienen la esperanza. Piraña, mientras disfruta de su popularidad, tiene dos sueños: primero, instalar césped sintético en su cancha de once; segundo, volver a jugar en la D.
Jaime Sarlanga: Una Leyenda del Fútbol Argentino
Jaime Sarlanga, figura icónica del fútbol argentino, nació el 24 de febrero de 1916 en Tigre, provincia de Buenos Aires, durante una era en la que el fútbol en Argentina todavía era amateur y los equipos reconocidos hoy apenas comenzaban a formarse. Desde joven, Sarlanga demostró un talento sobresaliente en el fútbol, un deporte que estaba ganando popularidad en los barrios argentinos. A pesar de mantener siempre un perfil bajo en su vida personal, se sabe que se casó y tiene un nieto, el empresario Juan Pablo Sarlanga.
Sarlanga debutó oficialmente a los 18 años en el Sportivo Delta de Tigre, donde su habilidad en el campo captó la atención de colegas, periodistas y aficionados. Su talento natural y dedicación lo convirtieron rápidamente en una leyenda del deporte argentino. Brilló como delantero central, siendo conocido como el "9 de área" debido a su habilidad para estar siempre listo para atacar el arco rival.
A lo largo de su carrera, Sarlanga ganó un total de 8 títulos, incluyendo los Campeonatos de 1940, 1943 y 1944, la Copa Carlos Ibarguren en 1940 y 1944, la Copa Competencia Británica y las Copas Confraternidad en 1945 y 1946. Comenzó su carrera en Defensor y luego pasó por las divisiones juveniles del Sportivo Delta de Tigre, debutando en Primera División en 1934. Posteriormente, tuvo una breve etapa en Ferro, donde formó parte de una destacada línea delantera junto a Bernardo Gandulla y Raúl Emeal.
Sin embargo, fue en el Club Atlético Boca Juniors donde el abuelo de Juan Pablo Sarlanga dejó una huella imborrable. Junto a Gandulla, quien había jugado en Vasco Da Gama en 1939, Sarlanga se consagró campeón del Torneo de Primera División de Argentina en su primer campeonato con el Xeneize. Su impacto en Boca Juniors consolidó su lugar en la historia del fútbol argentino.
La historia del Club Atlético Piraña es un relato de perseverancia y pasión, una montaña rusa de éxitos y dificultades. Desde su fundación en 1942, pasando por su apogeo en los años 70, hasta su declive y resurgimiento en 2014, Piraña ha demostrado ser un símbolo de la tenacidad argentina. Inspirado por la figura legendaria de Jaime Sarlanga, el club ha dejado una marca imborrable en la historia del fútbol, no solo por sus logros deportivos, sino por su capacidad de renacer de las cenizas.
A pesar de los desafíos, como la necesidad de una cancha adecuada y la meta ambiciosa de instalar césped sintético, la comunidad de Piraña sigue adelante con esperanza y determinación. Sueñan con ver a su amado club volver a la D, y con cada pequeño paso, se acercan más a ese objetivo.