Las acciones fueron muy parejas y la selección argentina sintió la salida de Lionel Messi por lesión a principios del segundo tiempo, pero tuvo el carácter y la personalidad para reponerse.
Por otra parte, este partido fue el último de Ángel Di María con la selección argentina, porque ya había anunciado que no volverá a jugar oficialmente con la camiseta celeste y blanca, y fue reemplazado por Nicolás González en un momento de enorme emoción.
El equipo argentino es campeón mundial, bicampeón de América y campeón intercontinental, al haberle ganado la Finalissima en 2022 a Italia, en aquel momento, campeona de Europa. Ahora, el equipo de Lionel Scaloni deberá enfrentar a España por la misma competición. “La Roja” es flamante campeona de Europa al vencer, en la misma jornada que la final de la Copa América, a Inglaterra por 2-1 en Berlín.
El primer tiempo tuvo dominio alternado, aunque siempre dando la sensación de que el equipo colombiano llevaba más peligro en el ataque y una mayor vocación ofensiva, aunque en los últimos metros chocaba contra la firme defensa argentina, especialmente por parte de sus centrales Cristian Romero y Lisandro Martínez.
Sin embargo, antes del minuto de juego la selección argentina tuvo una clara oportunidad desaprovechada por Julián Álvarez tras un muy buen centro de Montiel desde la derecha.
Pero de a poco, Argentina se fue replegando, con un Rodrigo De Paul demasiado volcado en tareas defensivas, para cubrir la banda izquierda del ataque colombiano, donde juega una de las estrellas del torneo, el extremo Luis Díaz, tratando de ayudar a Montiel en la marca.
Lionel Messi, metido en el partido, pero con las evidencias del paso del tiempo, tuvo otra oportunidad a los 20 minutos, pero su remate, directo al arco, salió mordido y acabó en un rechazo de la defensa cafetera.
Lo de Argentina fue siempre firmeza, marca, pases cortos y búsqueda de huecos para filtrarse, con un Ángel Di María poco presente, absorbido por la marca, que terminó rotando desde el extremo derecho al izquierdo, y con Álvarez desconectado del resto del equipo, sin profundidad.
Colombia atacó más y mejor, pero no pudo penetrar en los últimos metros albicelestes, y no es casualidad que su mayor posibilidad haya estado en un remate de Jefferson Lerma de más de 35 metros, apenas desviada y cuando Emiliano Martínez se había arrojado hacia ese palo derecho, pero no llegaba.
Un cambio importante comenzó a gestarse cuando Di María se instaló por la banda izquierda y empezó a traerle problemas a Santiago Arias, su marcador, desbordándolo y generando centros al área muy complicados, aunque ya a los 12 minutos del segundo tiempo, en vez de centrar sacó un remate cruzado, que Camilo Vargas apenas pudo desviar al córner.
Fueron minutos de dominio total argentino, metiendo a Colombia contra su área y jugándose a la contra. Pero a los 20 minutos, se produjo el golpe, inesperado para los argentinos: Messi salió lesionado debido a un estiramiento durante una jugada al final del primer tiempo, reemplazado por Nicolás González. Es muy poco habitual que el capitán albiceleste salga y menos en una final, pero se notó que no podía más. Su llano en el banco de suplentes, tomado por la cámara del estadio, y el aliento de los hinchas, quedará para el recuerdo. Acaso haya sido el último partido de Copa América de su vida.
Fue claro, también, que el equipo argentino sintió la ausencia de Messi y trató de mantenerse firme atrás, aunque no parecía encontrar espacios para ataques profundos. En cambio, Colombia tuvo dos tiros libres peligrosos, que no pudo aprovechar James Rodríguez, con su gran pegada.
Casi sobre la hora, luego de una serie de pases, un cambio de punta hacia la izquierda a modo de centro terminó con un cabezazo cruzado de Nicolás González, que estuvo a punto de vencer a Vargas, pero la pelota rozó el poste izquierdo del arquero colombiano.
Ya en tiempo de descuento, un error en la salida de la defensa colombiana provocó un quite de Álvarez, pero fue bien atorado por Vargas y los centrales cafeteros. Argentina estuvo dos veces a puntos de marcar el gol de la victoria, ante un rival que parecía tambalear justo en el momento final.
Sin que lograran sacarse ventajas, hubo que ir al tiempo suplementario, una gran prueba física en una noche muy calurosa, y con los dos equipos desgastados. A los 4 minutos, Argentina estuvo a punto de abrir el marcador con un remate de Nicolás Tagliafico, que entró vacío por la izquierda, pero su remate fue detenido in extremis por el arquero Vargas.
La entrada de Juanfer Quintero por James Rodríguez le dio frescura al equipo colombiano, pero siempre terminaba chocando con la firmeza de la defensa argentina, respaldada también por Leandro Paredes, que había ingresado por Enzo Fernández. Arriba, Lautaro Martínez, que reemplazó a Álvarez, alternaba buenas y malas, en un partido de ida y vuelta.
A los 6 minutos de la segunda parte, por fin, una escapada de Lautaro Martínez terminó con la pelota en la red, desatando la euforia del público albiceleste.
A los 10 minutos, se produjo otro momento emocionante cuando Ángel Di María, en su último partido con la selección argentina, salió reemplazado por Nicolás Otamendi, en lo que significó su despedida con la camiseta celeste y blanca.