Sofía y Laura desarrollan un gran trabajo con las divisiones menores en Leonardo Murialdo. Ambas coinciden en que disfrutan este momento
Formadoras de personas. Tres palabras que marcan a fuego sagrado el deseo de Laura Jara y Sofía Molina, dos históricas jugadoras Canarias que trabajan con el semillero del hockey sobre patines de la institución de Villa Nueva.
Formadoras, una bella palabra que implica muchas cosas, más allá de la sencillez que aparenta en su fonética. Hay vocación en ellas, vocación que significa inclinación o interés que una persona siente en su interior para dedicarse a una determinada forma de vida o un determinado trabajo.
Es ya noche en el club y se distinguen a lo lejos las voces de Laura y Sofía dando instrucciones a las pequeñas jugadoras que sueñan en ser como ellas dentro de un futuro cercano.
Ríen, disfrutan y trabajan de lo que les gusta. Laura es ya Profesora de Educación Física dedicada a la discapacidad y Sofi está a punto de recibirse de Kinesióloga tras haber pasado antes por la carrera de abogacía.
Dicen estar muy cerca del retiro de la actividad. Aseguran estar muy cómodas en el club desempeñando el rol de formadoras y también coinciden en devolver con este accionar algo al club que tanto les brindó.
“Empecé en mayo, aprovechando que tenía un tiempo libre para darle a una mano a Laura (Jara), la otra forma. Vamos creciendo de manera constante. Me ha sorprendido la gran cantidad de papás que han venido. Estamos en la etapa de disfrutar, de seguir aprendiendo, pero fundamentalmente disfrutar de nuestros últimos años como jugadora” dice Sofía Molina, una de las referentes en estos últimos años de la escuadra de Villa Nueva.
“Son ya 23 años jugando con esta camiseta. Es mucho. Son momentos hermosos. Antes de la pandemia había pensado en colgar, pero luego cambié de opinión y retomé. Todavía hay ganas de jugar” cuenta la futura kinesióloga.
“En Murialdo empecé a jugar cuando tenía 8 años y voy a cumplir 29. Estoy en un momento en el que creo que es mi mejor año y esto es porque he cambiado la mentalidad. Estoy divirtiéndome, disfrutando lo que más pueda. He vuelto luego de un año y medio.” Dice Laura Jara, una de las jugadoras más queridas en la entidad Canaria y que se desempeña trabajando en el área de discapacidad.