“Los años Niños están asociados a precipitaciones por encima del promedio y eso se estaría terminando, por lo que habrá que estar atentos a lo que ocurra en la segunda mitad del invierno, que es cuando arribe La Niña“, explicó en LVDiez el investigador y asistente en el Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA), Pierre Pitte.
Pero se combinan, y posiblemente retroalimentan, con el calentamiento global que produce tantos las olas de calor como los deshielos.
El contexto del lado norte del hemisferio registra 12 meses consecutivos que se sitúan como los más cálidos de acuerdo con las comparaciones interanuales que hace el servicio de seguimiento del cambio climático de la Unión Europea.
Inclusive la Organización Meteorológica Mundial afirma que hay un 86% de posibilidades de que uno de los próximos cinco años eclipse a 2023 se convierta en el más cálido jamás registrado.
Nieve, hielo, frío y lluvia
Y del lado sur de la línea del Ecuador, en la mitad más austral que abarca a Argentina y Chile, se vive desde entrado el otoño la faz inhóspita del frío, nieve y precipitaciones, que abanican desde Mendoza a Santa Cruz del lado argentino de la cordillera.
Las consecuencias se vienen encadenando y, de acuerdo con las proyecciones de modelos climáticos internacionales, existe más de 60% de probabilidad de que la caída de agua sea deficitarias durante el invierno, con extensión a la primavera.
Pero la copiosa nieve no aflojaría, según el pronóstico de la Dirección de Contingencias Climáticas, al menos hasta el 27 de junio.
La alerta amarilla que rige, y se proyecta que continuará también, por lluvias que luego se transforman en nevadas, anunciadas por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), no tiene visos de ser levantada de inmediato.
En Neuquén, las zonas afectadas se localizan el este de Loncopué, Picunches, Ñorquín, el oeste de Añelo, Pehuenches y el sur de Chos Malal y Minas.
En la provincia de Río Negro, la meseta de Pilcaniyeu, Ñorquincó, Nueve de Julio, el oeste de El Cuy y Veinticinco de Mayo.
En cuanto a Chubut, toda la provincia está bajo esta alerta.
En Santa Cruz, las zonas afectadas serán el nordeste cordillerano y la zona de mesetas de Lago Buenos Aires y Río Chico.
Lluvia más nieve
El SMN prevé en estas zonas nevadas de variada intensidad, algunas fuertes, con valores acumulados entre 30 y 70 cm, en ascenso. No descarta lluvia y nieve combinadas en zonas más bajas.
El Paso Internacional Los Libertadores, que une Mendoza con Santiago, de nuevo fue cerrado al tránsito para todo tipo de vehículos por octava jornada consecutiva.
Y otra vez los aeropuertos padecieron las nevadas, como ocurrió en el Teniente Luis Candelaria de San Carlos de Bariloche cuando un avión Boeing 737-8Q8 de la aerolínea low cost Flybondi sufrió un deslizamiento en pista, a partir del que se decidió suspender las operaciones durante dos horas.
El de San Martín de los Andres también se cerró debido a la acumulación de nieve en la pista, que impedía tanto el despegue como el aterrizaje de los aviones. La tormenta, asimismo, dejó a media localidad sin luz durante gran parte de la jornada.
Chubut fue azotada por una fuerte ola polar. Hubo decenas de varados por más de 30 horas en las principales rutas de la provincia. Comodoro Rivadavia fue la localidad más afectada.
En la ruta 26, camino a la localidad de Sarmiento, se registraron 2 metros de nieve, por lo que varios vehículos quedaron tapados por completo y las autoridades debieron trabajar para liberarlos.
Comodoro24 informó que quedaron aislados cerca de 150 trabajadores petroleros y el Ejército Argentino acudió a ayudar a rescatarlos.
Hubo cortes en Río Negro, la ruta 237, pasando Piedra del Águila, y también la 40, en Lonquimay, Zapala, en la 43 entre Andacollo y Chos Malal, y en el empalme de Ruta Provincial 48 con el paso fronterizo Hua Hum, más
Además un derrumbe de piedras, tierra y nieve sobre la ruta 79, que afectó el acceso a la Colonia Suiza, uno de los atractivos turísticos de Bariloche.
Arde Europa
Europa está lidiando con una avalancha de turistas muertos y desaparecidos en medio de un calor peligroso.
En el Coliseo y la plaza de San Pedro del Vaticano, dos de los lugares más emblemáticos de Roma, miembros de la ONG Greenpeace Italia detectaron en las calles 50 grados en sus superficies en tiempo real, en una jornada en que rige el alerta roja por la ola de calor que azota el país.
Otro punto donde se superaron los 50 grados en el primer día del verano fue la mayor estación de tren de la capital italiana, Termini, por la que pasan más de 450.000 viajeros a diario, explicó la ONG.
Se prevé alcanzar una temperatura máxima de 37 grados, según el Ministerio de Sanidad Italiano, que también advierte del máximo nivel de alerta altas en otras siete ciudades italianas: Ancona, Campobaso, Frosinone, Latina, Perugia, Rieti, en el norte, y en el sur, Palermo.
Los países alrededor del Mediterráneo padecieron otra semana de temperaturas abrasadoras que han contribuido a los incendios forestales desde Portugal hasta Grecia y a lo largo de la costa norte de África en Argelia, según el Observatorio de la Tierra de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos.
En Serbia, los meteorólogos pronosticaron temperaturas de alrededor de 40ºC esta semana mientras los vientos del norte de África impulsaban un frente cálido a través de los Balcanes.
En Arabia Saudita, más de mil peregrinos musulmanes, de los dos millones que caminan hacia el monte Arafat, también conocido como Yabal al-Rahma o Monte de la Misericordia, murieron durante la última semana del “hach” en la Gran Mezquita de La Meca, debido a temperaturas que superan los 51ºC, según informes de autoridades extranjeras.
También Nueva Delhi, que viene de 38 días consecutivos con temperaturas máximas de 40ºC o más, desde el 14 de mayo, registró este miércoles su noche más cálida en al menos 55 años, y el Observatorio Safdarjung de la India informó una temperatura de 35,2ºC a la 1 de la madrugada.
Partes del nordeste y medio oeste de Estados Unidos son afectadas por un domo de calor, con más de 86 millones de personas bajo alerta de calor el jueves, según el Servicio Meteorológico Nacional.
De hecho, un estudio publicado por meteorólogos este jueves indica que las olas de calor mortales son 35 veces más probables a causa del cambio climático en Estados Unidos, México y América Central.
La probabilidad de que el calor extremo que afectó a todos esos países en mayo y junio se reproduzcan es cuatro veces mayor que hace 25 años, según esta asociación de climatólogos conocida como Atribución Meteorológica Mundial (WWA por sus siglas en inglés).
En México, por lo menos 125 personas murieron a causa del calor este año, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud. Más de 2300 han sufrido golpes de calor, deshidratación y quemaduras de sol.
Controversia climática
Las intensas nevadas que se registraron en los últimos meses se posicionaban como un dato alentador para las autoridades de la Dirección General de Irrigación de Mendoza, pero desde el Conicet les advirtieron que seguirá faltando agua y las nevadas mermarán.
En Conicet aclararon que “el fenómeno que ocurrió el año pasado, y que se estaría repitiendo este año, tiene que ver con la presencia de El Niño, que ya llegó a su fin”.
Y piden repensar el panorama a fin de cuidar los recursos hídricos con el máximo esfuerzo posible para los próximos años.
Para este fin de semana se prevé otro evento de Río Atmosférico, mucho más débil que el anterior.
Se trata de la región de la baja troposfera que suele tener forma de banda alargada y estrecha, de varios miles de kilómetros de longitud, que transporta grandes cantidades de agua en forma de vapor en comparación con su entorno por la atmósfera.
Está pronosticado que sea de categoría 2, y que presente importantes acumulados de precipitación en la región norte de Neuquén y la zona sur cordillerana de Mendoza.
“Luego, en la zona central cordillerana de Mendoza están pronosticadas nevadas intensas entre viernes y sábado, inclusive, y para la próxima semana se prevé un importante descenso térmico”, afirmó Pitte.
Marcos Benedicto, meteorólogo del Conicet, explicó que el fenómeno de las últimas semanas, en Mendoza, tiene que ver con la presencia de un Río Atmosférico, categoría 5, que dejó importantes inundaciones y acumulados de precipitaciones para toda la región de Chile y la cordillera de Los Andes.
Al mismo tiempo, la conservación de los glaciares se vio afectada y el proceso de derretimiento de la cordillera no dejó de avanzar.
“Lo que hemos observado en toda la cordillera de Los Andes es un adelgazamiento de la pérdida de volumen de hielo totalmente generalizada. Hay un retroceso de la pérdida de área y si bien no están los datos oficiales aún, se estima que podría ser del 10% o 15% respecto al 2018”, explicó el especialista.
“El aumento de los combustibles fósiles, que se mantiene en forma sostenida, la concentración del gas efecto invernadero que subió sostenidamente a lo largo del siglo XX y XXI, motorizaron un aumento de las temperaturas”, dijo.
Y agregó: “Que haya menos nieve y más precipitaciones en forma de lluvia favorece, sin dudas, el derretimiento de los glaciares”.