A partir de abril los propietarios e inquilinos deberán acordar cómo continuarán los contrato y el financiamiento, en caso de que haya una deuda acumulada.
El congelamiento de los alquileres concluirá a fin de mes, tras lo cual propietarios e inquilinos deberán acordar cómo continúan los contratos y el financiamiento si hubiera deuda acumulada, al tiempo que desde el Gobierno afirman que “no habrá posibilidad de desalojos sin mediación”.
El ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi, anticipó ayer a Télam que cuando venza el decreto que congela alquileres y prohíbe desalojos el 31 de marzo próximo, “no habrá extensión”.
El funcionario aseguró que tras el descongelamiento “no habrá posibilidad de desalojos sin mediación”, dado que “lo más fuerte en la reglamentación de la Ley de Alquileres es la mediación de los desalojos y la inscripción en AFIP de los contratos”.
La Ley de Alquileres establece que el Ministerio de Justicia debe facilitar ámbitos de mediación y arbitraje gratuitos o de bajo costo para la resolución de conflictos derivados de los alquileres.
En tanto, la obligatoriedad de inscribir los contratos en AFIP entró en vigencia esta semana, y los propietarios que no tengan registrado el contrato podrán ser multados, al tiempo que no podrán llevar adelante juicios de desalojo.
En este contexto, Inquilinos Agrupados manifestó en un comunicado “preocupación” por la finalización el 31 de marzo del decreto que comenzó a regir un año atrás, entre las primeras medidas económicas de emergencia que tomó el Gobierno por la pandemia.
“El ministro de Hábitat, Jorge Ferraresi, anunció que no se va a extender el decreto que suspende desalojos; a partir del 1/4/21 las familias endeudadas quedarán en la calle y habrá juicios de embargos a mansalva”, alertó la organización.
En el caso de que se haya acumulado deuda, el decreto contempla que los inquilinos deberán pagar las deudas de alquileres en un plazo de 6 a 12 meses, sin punitorios.
Según Inquilinos Agrupados, los resultados de la encuesta nacional a inquilinos de enero arrojó que el 40% no sabe dónde va a vivir cuando finalice el decreto.
En tanto, el 35,7% no pudo pagar el alquiler de enero o lo abonó parcialmente, lo que “los ubica en una situación de posible desalojo”.
Gervasio Muñoz, presidente de la federación dijo que “durante la pandemia el decreto evitó que familias quedaran en la calle extendiendo automáticamente los contratos de alquiler y el mercado inmobiliario respondió a esa medida con aumentos de precios que hoy”.
“El panorama hoy es: familias que hace meses acumulan deudas, no tienen dinero para mudanza, no tienen dinero para pagar un nuevo alquiler, y mucho menos para saldar las deudas mientras pagan un nuevo alquiler. La única alternativa es la calle”, advirtió.
Del otro lado de la mesa, Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, dijo que “en el mercado habitacional, la acción judicial en un desalojo y en un cobro no son frecuentes”.
“Los conflictos se resuelven entre propietarios e inquilinos”, aseguró Bennazar en declaraciones radiales.
El directivo agregó que el sector viene “desde hace 36 meses en un tobogán de caída libre” y aseguró que “el mayor de los problemas para el propietario es la rentabilidad, es la más baja de la historia”.
“Vamos a tener datos concretos de las familias vulnerables y aplicaremos distintas políticas”, aseguró Ferraresi.