La escolarización en los más chiquitos es un hecho en Mendoza, tras la implementación de las salas de 3 años, que si bien no es una etapa escolar obligatoria, la idea es que sea provechosa en aprendizaje.
Para las autoridades que monitorean el nivel inicial es importante el compromiso de los padres, como así también que reconozcan que sus hijos "no solamente se va a jugar", sino a aprender para que en un futuro logren desenvolverse con más facilidad en las posteriores trayectorias escolares.
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En diálogo con Radio Jornada, el director de Educación Inicial de la Provincia, Marcelo García, explicó la importancia que tiene la escolarización a temprana edad.
El funcionario mencionó que la experiencia en el aula ayuda al infante a construir habilidades cognitivas, emocionales, sociales y que son necesarias para lo que es el resto de la vida. En este sentido, resaltó que desde que nacemos estamos aprendiendo.
"Nosotros en estas edades del nivel inicial hablamos de diferentes lenguajes y todos son muy valiosos, no solamente lo verbal. Y esto nos va a permitir que el chico vaya desarrollando lo que nosotros le decimos lo personal y social, que tiene que ver con la autoestima", expresó García.
Sobre la cantidad de chicos en salas: "tenemos aproximadamente 17.900 chicos en salas de cinco, 14.000 en salas de cuatro y más de 2.500 en salas de tres".
Las experiencias son vivencias que se trasforman en aprendizaje
El encargado de Educación Inicial, también se refirió al proceso de aprendizaje en los pequeños de tres años y dijo que el Gobierno trabaja en una campaña fuerte sobre la asistencia y presencialidad significativa.
"No nos quedamos solamente en que el chico vaya al jardín, sino que esté presente. Cuando nosotros decimos presencialidad significativa es que pueda estar con todos los sentidos, que pueda sentir que aprende".
Sobre el contexto actual de las familias, “antes se hablaba de guardería, hoy hablamos de jardines maternales porque el jardín maternal ofrece propuestas diferenciadas a lo que antes era propiedad exclusiva o potestad exclusiva de la familia. ¿Por qué? Porque hoy las familias están mucho tiempo fuera de su casa, de los hogares, porque tienen que trabajar o por otras circunstancias. Entonces, muchos chicos están mucho más tiempo en los jardines que en las familias".
Y agregó: "entonces tiene que haber una alianza entre la escuela y la familia. Por eso es que el eslogan es que cada día cuenta, ¿no? Y que los chicos tienen que estar todos los días en el jardín".
"O sea, un día que no van es un día potente que nosotros les estamos restando, les estamos quitando. Así que ese es un mensaje que queremos difundir y queremos también erradicar el mito de que al jardín se va a jugar solamente", aseveró.
"En el jardín se juega. Se juega, pero también se aprende. Se aprenden muchas cuestiones. Venimos haciendo talleres con la familia, vamos a los jardines y después de hacer un taller de juegos, se hablamos con la familia y recuperamos qué cosas han aprendido en esas actividades", sentenció.