Que dolor. Cuanta pena. Las lágrimas estrujan el alma. Un tipo noble, buena gente dejó de existir ayer. Fue sorpresa. Fue desazón. El básquetbol mendocino, el deporte en general, lamenta la partida del querido Antonio Alvaro.
Así como hace poco sufrimos la partida de Sergio Pedemonte, también hombre ligado al básquetbol, ahora, y de la misma manera se sufre el deceso del Tono.
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Alvaro fue basquetbolista de Andes Talleres y entrenador en la disciplina. El Tono fue un tipo querido, querible y apasionado del básquetbol. Y le gustaba transmitir sus enseñanzas con total humildad.
Alvaro es un referente de Andes Talleres Sport Club, pero también se desempeñó en Agua y Energía y en la Selección de Mendoza, entre otros equipos. Fue campeón con Talleres y Mercado Cooperativo de Guaymallén dejando su impronta en el deporte de la americana en nuestra provincia.
Israel, Rodrigo, Jordan y Lucas, sus hijos, heredaron su pasión y jugaron con el mismo temple. Tono, autor de frases como “usted no puede comer chicle y caminar a la vez” también incursionó en el periodismo deportivo. Fue director de la revista Nuevo Cuyo Deportes y también comentarista en Canal 4 de Supercanal en los primeros años de la década de los 90’ junto a periodistas de la talla de Marcelo Gelfman, Esteban Alexis Dapás, Ángel Diego Acosta y Guillermo Casares, entre otros.
Muchos recuerdan al Tono corriendo con la camiseta número 5 de Talleres en un equipo que también integraban Luis Arméndariz, Raúl Estalles, Trillo y Raúl Brioude. En alguna ocasión recibió un premio UNO a la Excelencia Deportiva y fue homenajeado por Francisco Pachy Romero.
El básquet vuelve a perder a un gran referente y su familia y amigos a un ser excepcional. ¡Hasta pronto Tono!!!!!